París. En medio de un silencio inusitado en una cancha central que se había quedado vacía, Rafael Nadal festejó su cumpleaños número 35 haciendo algo muy conocido: derrotar a Richard Gasquet.
El campeón defensor del Abierto de Francia se impuso 6-0, 7-5, 6-2 a Gasquet y mejoró a una foja de 17-0 en su carrera ante el francés, a quien enfrentó por primera ocasión en 2004.
Gasquet no ha ganado siquiera un set en sus últimas 12 derrotas ante Nadal. La última vez que se llevó un parcial frente al español se remonta a 2008.
No hubo espectadores en la cancha Philippe Chatrier para atestiguar la victoria 102 de Nadal en Roland Garros. Todos debieron marcharse a las 9 de la noche, en cumplimiento de las reglas impuestas por la pandemia.
El mallorquín, 13 veces monarca en Francia, ganó el primer set en 24 minutos.
“Creo que he jugado un primer set fantástico”, destacó. “No siento que Richard haya jugado tan mal como para tener ese parcial, pero es que yo no he fallado tanto".
Gasquet remontó un 5-2 en la manga siguiente para equilibrar 5-5, pero erró una volea que lucía fácil ante la red en el duodécimo game. Nadal volvió a romperle el saque para llevarse el segundo et.
Nadal finiquitó el duelo en su segundo match point. Se unió a Bjorn Borg, Novak Djokovic, Roger Federer e Ivan Lendl, como los únicos tenistas que han conseguido fojas de 17-0 ante un mismo oponente en la era de los torneos abiertos.
Djokovic, primero del escalafón mundial, y Federer, quien tiene fojas de 17-0 contra dos rivales, avanzaron más temprano a la tercera ronda.
Nadal no se mostró molesto por finalizar casi a las 11:30 de la noche en condiciones de mucha humedad.
“Lo principal es sentir que estoy jugando bien”, dijo el tercer preclasificado, quien busca un 21er título en majors para superar por uno a Federer y enfrentará en la siguiente fase a Cameron Norrie, un tenista que no figura entre los preclasificados.
Federer dio cuenta 6-2, 2-6, 7-6 (4), 6-2 de Marin Cilic para su novena victoria en 10 partidos contra el croata y la quinta en un grande.
“He disputado un muy buen partido. He quedado algo sorprendido”, dijo Federer. “Se confirma que aún tengo algo en el tanque. Me ha quedado algo de energía y eso es muy alentador para mi confianza”.
Federer, quien cumplirá 40 años el 8 de agosto, compite en un Grand Slam por primera vez desde el 30 de enero de 2020, cuando cayó ante Djokovic n las semifinales del Abierto de Australia.
“Supongo que soy un debutante en el nuevo circuito”, bromeó Federer.
Podría volverse a ver con Djokovic en esa instancia al estar en la misma zona del cuadro, junto a Nadal — quien comparte con Federer el récord de 20 grandes.
Djokovic, por su parte, despachó 6-3, 6-2, 6-4 al uruguayo Pablo Cuevas. El serbio y número uno del mundo levantó las ocho bolas de quiebre que afrontó. El campeón de 18 grandes se las verá ahora con el lituano Ricardas Berankis.
El argentino Diego Schwartzman avanzó a la tercera ronda con una contundente victoria 6-4, 6-2, 6-4 sobre el esloveno Aljaz Bedene.
Décima cabeza de serie del torneo, Schwartzman compite en París con la carga de convalidar su jerarquía tras haber alcanzado las semifinales de la pasada edición que se disputó en el otoño parisino.
Había llegado antecedido por una mala racha, eliminado a las primeras de cambio en los Masters de Montecarlo, Madrid y Roma. Pero haber encadenado dos victorias en Roland Garros le han levantado la moral.
“Hace 10 días que me voy sintiendo cada vez más cómodo”, dijo Schwartzman. “Todavía tengo que seguir mejorando, pero a medida que vas ganando y teniendo ese día de descanso, todo ayuda a mejorar. Es lo que me suele pasar en los Grand Slam”.
Su rival de turno será el alemán Philipp Kohlschreiber, quien dio cuenta 6-3, 7-6 (4), 4-6, 6-1 del ruso Aslan Karatsev (24to cabeza de serie). Schwartzman sufrió derrotas ante Karatsev en el Abierto de Australia y en Madrid este año.
También el jueves, el italiano Matteo Berrettini (9no preclasificado) frenó la marcha del argentino Federico Coria al vencerle 6-3, 6-3, 6-2.
Mermada por una dolencia en la cadera, la número uno mundial Ash Barty se retiró el jueves de su partido de la segunda ronda del Abierto de Francia, con lo que el torneo de Grand Slam en tierra batida quedó sin las tres primeras del ránking femenino.
La campeona del torneo en 2019 perdía 6-1, 2-2 cuando dio la señal que no estaba en condiciones de seguir jugando contra su rival polaca Magda Linette en la Philippe Chatrier.
“Estaba con mucho dolor, y pasó a ser muy severo, ya era algo temerario seguir", dijo la australiana sobre una lesión que afloró cuando se entrenaba previo al torneo.
Además de la baja de Barty, la número dos Naomi Osaka se retiró tras la primera ronda —la japonesa explicó que se iba a tomar una pausa de la competición por motivos de salud mental — y la número tres Simona Halep renunció previo al torneo debido a una lesión en una pierna.
En la antesala a este Abierto de Francia, Barty disputó 13 partidos en arcilla y ganó 11. Registró una marca de 27-5, con tres títulos de sencillos, previo a Roland Garros. Pero se vio forzada a retirarse en los cuartos de final de Roma en mayo por una molestia en el brazo derecho. Afirmó que había superado la lesión y que no le afectó en París.
“Me rompe el alma", dijo Barty. “Había tenido una brillante temporada en tierra. Es algo de mala suerte que se dio en este preciso momento. Que fuera justo durante el fin de semana, sin darme el tiempo suficiente para recuperarse, es decepcionante".
Barty decidió no defender su título el año pasado debido a la pandemia de coronavirus, optando por permanecer en Australia.
Iga Swiatek, la defensora del título, avanzó a paso redoblado a la tercera ronda al despachar 6-1, 6-1 a la sueca Rebecca Peterson. La polaca (8va cabeza se serie) se medirá en la siguiente instancia contra la estonia Anett Kontaveit.