La dirigencia nacional del Partido del Trabajo lamentó los casos de violencia política que se han registrado en las últimas semanas, mismos que consideró buscan en el fondo enrarecer el clima electoral de cara a los comicios del 6 de junio.
Alberto Anaya, dirigente petista, alertó que se podría recrudecer este tipo de actos al cierre de campañas y en los comicios, ya que “es una escalada de la derecha”, por lo que exhortó a las distintas fuerzas políticas a coadyuvar para fomentar la tranquilidad en lo que resta del proceso electoral.
“Como partido condenamos los hechos de violencia están llegando a cobrar vidas humanos, y que buscan enrarecer el clima electoral particularmente el día de la jornada electoral. Creo que es una estrategia para generar un clima de terror para que la gente no salga a votar”, indicó.
Los actos de este tipo no abonan a que haya elecciones en la que los electores puedan salir libremente a ejercer su voto. “Todos necesitamos derrotar las intentonas que buscan que haya baja participación en la jornada electoral ahuyentando a los ciudadanos, a efecto que puedan ellos trabajar irregularidades electorales el día de las votaciones”, agregó el petista.
Aunque el partido no cuenta con cifras sobre el impacto de la violencia en sus militantes, insistió que los casos en los que han perdido la vida abanderados, así como las más de 300 declinaciones registradas por violencia política son lamentables.