La Haya. El primer ministro holandés Mark Rutte anunció el viernes el fin del "confinamiento" a partir del cinco de junio con una nueva flexibilización de las restricciones contra el coronavirus, en particular con la autorización para comer dentro de los restaurantes.
El número de hospitalizaciones y el de nuevos casos continúa bajando, lo que permite esa nueva fase cuatro días antes de lo previsto.
"Las flexibilizaciones a partir del cinco de junio significan de hecho el fin del confinamiento", declaró Rutte en rueda de prensa.
"Tomamos un riesgo calculado, pero si la semana que viene el cielo se nos cae encima y las cifras aumentan de nuevo, nos enfrentaremos a una nueva situación", añadió.
Sin embargo, ese retroceso es "poco probable", añadió Rutte, citando a los científicos que aconsejan al gobierno, según la agencia de prensa holandesa ANP.
El gobierno holandés levantó recientemente el toque de queda y autorizó a los restaurantes y cafés abrir terrazas.
A partir del cinco de junio, esos establecimientos podrán acoger a sus clientes en el interior, hasta las 22H00 (20H00 GMT).
Los museos podrán recibir visitas, con un flujo de un visitante por metro cuadrado, y los cines y teatros, un máximo de 50 espectadores.
"La gente, como yo mismo, espera con impaciencia poder acudir a un concierto o comer en el restaurante", añadió.
El coronavirus ha provocado más de un millón y medio de contagios y la muerte de más de 17 mil 500 personas en Holanda.