Washington. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, condenó el miércoles las violaciones "inaceptables" de los derechos humanos en la región etíope de Tigray e instó a un alto al fuego inmediato.
"Las violaciones de derechos humanos a gran escala que están ocurriendo en Tigray, incluida la violencia sexual, son inaceptables y deben terminar", dijo en un comunicado, pidiendo a los beligerantes involucrados en este conflicto que "declaren y se adhieran" a un "alto al fuego".
Más de medio año después del lanzamiento de una operación militar anunciada como rápida por el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, los combates y los abusos continúan en la región de Tigray, donde un grave riesgo de hambruna se cierne desde hace varios meses.
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) también se dijo el miércoles "profundamente alarmado" por las detenciones de cientos de personas desplazadas en la región.
Las detenciones, llevadas a cabo el lunes por la noche por soldados de Etiopía y la vecina Eritrea, tuvieron como objetivo los extensos campamentos que se han formado cerca de la ciudad de Shire, dijeron el martes a la Afp Amnistía Internacional y testigos.
Biden indicó que el enviado de Estados Unidos para el Cuerno de África, Jeffrey Feltman, visitará la región la próxima semana.
Washington anunció el domingo restricciones de visado para funcionarios eritreos y etíopes acusados de incentivar el conflicto de Tigray.