Madrid. El técnico del Atlético de Madrid, Diego Simeone, sigue haciendo historia tras adjudicarse este sábado su segunda liga al frente del banquillo colchonero, su octavo trofeo desde su llegada en 2011.
La victoria este domingo ante el Valladolid (2-1) otorgó el título a los rojiblancos en la última jornada de LaLiga 2020/2021.
El campeonato liguero añade una nueva muesca a una década dorada del Atlético, iniciada con la llegada del Cholo y su partido a partido, que se ha convertido ya en lema de los rojiblancos.
"Es uno de los entrenadores más carismáticos de Europa y de los mejores del mundo. Estamos orgullosísimos de que siga siendo nuestro entrenador y ojalá lo sea por muchos años", afirmaba en enero el presidente del Atlético, Enrique Cerezo.
Hasta la llegada de su antiguo jugador ascendido a entrenador, el Atlético de Madrid sólo había ganado en 2010 una Europa League y una Supercopa de Europa, tras 14 años en blanco, incluyendo un breve pasaje por segunda división entre 2000 y 2002.
Pasión
El Cholo supo insuflar su pasión, siempre exteriorizada en el campo, a un equipo que inició una rápida senda ascendente que se plasmó en una Liga en 2014 y una Supercopa de España en 2014, una Copa del Rey en 2013, así como una Europa League y una Supercopa de Europa en 2012, doblete que repetiría en 2018.
Además, metió al Atlético de Madrid en dos finales de Champions, en 2014 y 2016, las dos perdidas ante su eterno rival de la capital, el Real Madrid, con el que ha luchado hasta última hora esta temporada por el campeonato español.
En esta década al frente del Atlético, que se ha trasladado del mítico estadio Vicente Calderón al Metropolitano, Simeone también ha sabido hacer la transición de jugadores y de juego.
Tras años sostenido en los Diego Godín, Juanfran, Filipe o Gabi, junto a Antoine Griezmann de estrella atacante entre 2014 y 2019, el Cholo supo reinventarse con jóvenes como el portugués Joao Félix, Marcos Llorente o el argentino Ángel Correa.
Después de la temporada 2019/2020 "de transición" por la salida de un ramillete de figuras, todos esos jóvenes se mostraron más asentados en la actual, dibujando sobre el terreno las ideas del Cholo, que también supo cambiar su juego amoldándolo a su nuevo efectivo.
Mirando a Luis Suárez
Conocido durante años por su férrea defensa, Simeone supo pasar a un juego más dinámico y más ofensivo, sin perder la compostura atrás.
La llegada del uruguayo Luis Suárez en esta temporada contribuyó mucho al nuevo estilo ofensivo del Atlético con multiplicación de pases cortos y desborde por las bandas.
"El equipo lo está acompañando (a Luis Suárez) para que él pueda desarrollar su mejor versión, que es el gol", afirmaba Simeone, reconociendo que cambió la idea de juego del equipo para hacer llegar más balones al artillero charrúa.
El fichaje de Luis Suárez, impulsado por Simeone, resultó un acierto, convertido en uno de los mejores goleadores de LaLiga -21 tantos- y uno de los artífices del éxito rojiblanco.
Con un nuevo éxito en el bolsillo y otro título en las vitrinas del Metropolitano, Simeone puede ahora mirar a la próxima temporada y a su renovación, que la prensa española considera cercana, y volver a iniciar también un nuevo asalto a la Champions, el trofeo que se le resiste.