Novara. El velocista belga Tim Merlier (Alpecin) ganó al esprint la segunda etapa del Giro de Italia, disputada este domingo en Novara (norte), tras la que el italiano Filippo Ganna (Ineos) se mantiene como líder de la carrera.

Merlier, campeón de Bélgica en 2019, pero que hasta ahora no había destacado por sus condiciones en las llegadas masivas, ha dado protagonismo en este Giro al Alpecin, un equipo de segunda categoría que gira entorno a su gran estrella, el holandés Mathieu van der Poel.

Ante la baja de 'VDP', que ha renunciado al Giro para consagrarse a la bicicleta de montaña, el equipo belga debe buscar triunfos parciales para justificar su invitación a la carrera rosa en virtud de su primer puesto la temporada pasada en la UCI Pro Team, la segunda categoría del ciclismo mundial, por detrás del UCI Pro Tour.

Pero en este primer esprint del Giro, Merlier sorprendió a los especialistas, especialmente a los italianos Giacomo Nizzolo, vigente campeón de Europa, y Elia Viviani, que acabaron segundo y tercero respectivamente.

En el caso de Nizzolo continúa la mala racha del velocista italiano de 32 años, tras haber sumado este domingo su décimo segundo puesto en etapas del Giro en ocho participaciones.

En cambio, Merlier, que ha esperado a cumplir 28 años para correr una gran vuelta por primera vez, ha logrado la victoria en su primer intento.

"Mi preparación en altitud ha sido buena. Tenía confianza antes de comenzar el Giro", comentó tras la etapa el belga, que suma la cuarta victoria esta temporada el día en el que se cumplen 10 años de la muerte de su compatriota Wouter Weyland en una caída en el Giro de 2011.

Cuarto quedó el holandés Dylan Groenewegen, que regresa a la competición tras una sanción de nueve meses por haber provocado un grave accidente a su compatriota Fabio Jakobsen en la Vuelta a Polonia del año pasado.

Vuelve Groenewegen

"Me siento listo para volver. Ver a Fabio correr en Turquía me ha ayudado", declaró el velocista holandés antes de la salida de la carrera en Turín, refiriéndose a la reciente reaparición de Jakobsen a la competición después de muchos meses de dura rehabilitación.

Pero las cosas aún no han vuelto a la calma entre los dos ciclistas. Groenewegen, que necesitó protección policial tras las amenazas recibidas, reveló recientemente que tuvo un encuentro con Jakobsen, lo que provocó la reacción inmediata del ciclista del Deceuninck, que estuvo cerca de la muerte tras su accidente en Polonia.

"Quiero precisar que Dylan no se ha excusado personalmente y no ha demostrado voluntad de asumir su responsabilidad por sus actos", declaró.

Groenewegen, que públicamente se hizo responsable del accidente ocurrido en Katowice, busca una victoria de etapa en un Giro que disputa por primera vez y que sumaría a las cuatro logradas ya en el Tour de Francia.

En este primer esprint superó a otros especialistas como el eslovaco Peter Sagan y sobre todo al australiano Caleb Ewan, que se quedó cerrado y solo pudo ser 10º.

El lunes se disputará la tercera etapa, de 190 km de recorrido entre Biella y Canale, con tres puertos de montaña en la segunda mitad de la carrera, antes de una breve subida a 15 km del final.

Será quizás la ocasión de despojar a Ganna de su maglia rosa, que conquistó tras imponerse el sábado en la crono inicial, aunque el especialista italiano no tiene intención de renunciar a la preciada prenda, como demostró este domingo al meterse en un esprint intermedio para arañar tres segundos suplementarios.

En la general, Ganna aventaja en 13 segundos a su compatriota Edoardo Affini y en 16 al noruego Tobias Foss.