Ciudad de México. A un mes de las elecciones la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) llamó a votar el próximo 6 de junio. Rogelio Cabrera López, arzobispo de Monterrey presidente de la CEM y Alfonso Miranda Guardiola, obispo auxiliar de Monterrey y secretario general del organismo episcopal resaltaron que sufragar no solo es un derecho, sino que también un “deber moral ineludible”.
Añadieron que “estamos enfrentando una época de enormes desafíos” y se debe cumplir con las responsabilidades cívicas y políticas. Por ello, los obispos mexicanos nos dirigimos a todos, sin distinción de credo, vocación, actividad, preferencia política o posición social, para animar a la más amplia participación ciudadana en el actual proceso electoral”.
Aparte en el foro Elecciones bajo la mirada de la fe, el nuncio apostólico en México, Franco Coppola, invitó a votar en conciencia, conociendo a los candidatos.
“Que entiendan el verdadero servicio a los demás, al bien común y no a sí mismos, que profesen y vivan nuestros valores, que sean capaces de defendernos con la palabra, con argumentos”.
En el encuentro organizado por el semario Desde la fe, con el respaldo de la Arquidiócesis Primada de México y de la CEM Carlos Garfias Merlos, vicepresidente de la CEM, pidió a los candidatos que “si ganan se comprometan a caminar con los ciudadanos, con las organizaciones y con las iglesias. Y si pierden, que también asuman su responsabilidad y compromiso para reconstruir a las personas, a quienes son víctimas de la violencia, a quienes tienen carencias, pobreza”.
Salvador Guerrero Chiprés, presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México, señaló que el tejido social sí puede reconstituirse y una forma es cuando decidimos por un proyecto de nación, estatal, regional, y las elecciones son una herramienta. “Hay que tener un equilibrio de juicio que nos permita confiar en la ley, la fe, la norma y la construcción de la sociedad a través de la participación electoral”.
Cabrera López y Miranda Guardiola, destacaron que “la jornada electoral del próximo 6 de junio, en la que se votarán un número significativo de gubernaturas, diputaciones, ayuntamientos y alcaldías, es una de las más grandes que se han organizado en la historia de México.
“Además, se suman diversos factores de carácter sanitario, social, económico y político que hacen de esta elección intermedia un momento crucial para definir el presente y el futuro de nuestro país. Por ello, es preciso que todos ejerzamos nuestro voto de manera libre, secreta y en conciencia, entendiendo que cada voto cuenta”.
Aclararon que “los ministros de culto de las iglesias no debemos ni pretendemos hacer propaganda o proselitismo a favor o en contra de cualquier candidato, agrupación o partido político” y exhortaron a “realizar un esfuerzo de discernimiento con el objetivo de optar por quienes puedan realizar el auténtico bien común”.
En el foro Elecciones bajo la mirada de la fe, Cristóbal Ascencio García, obispo de Apatzingán, zona con presencia de grupos criminales, aseguró que toda sociedad necesita de una autoridad que la rija y de gobernantes que velen por el bien del pueblo y estén dispuestos a sacrificarse por ellos.
Advirtió de la problemática de la compra del voto.“Que no se quiera saciar con un poco de pan a quien tiene hambre de justicia y seguridad. Es una enfermedad querer comprar o vender el voto”.
Guadalupe González Chávez, especialista en proceso de paz y seguridad, desarme y control de armamento, comentó que el proceso electoral no termina el día del voto, después de ese día hay que conciliar a todos los sectores. “¿Cómo transformamos la confrontación en conversación? En la que nadie se queda fuera. Tengamos conciencia de que, al votar, estamos generando un impacto en la comunidad. Votar o no votar implica consecuencias y es importante asumirlas”.
Norelia Hernández, asesora de víctimas, hizo un llamado a pensar en el voto con el compromiso de ejercerlo, “porque no podemos exigir si no contribuimos a la democracia de nuestro país”. Y advirtió, “si estamos actuando desde el odio, ese será el México que tendremos”.