El PRI en la Cámara de Diputados presentó una iniciativa de reforma para definir que las medidas que el Consejo de Salubridad General emita en caso de epidemias, pandemias o emergencias sanitarias, sean revisadas de forma integral y periódica por el Congreso de la Unión.
En la propuesta, de reforma al artículo 73 constitucional, se plantea también que, en caso de pandemia o emergencias sanitarias, la Secretaría de Salud tendrá obligación de dictar inmediatamente las medidas preventivas indispensables, a reserva de ser después sancionadas por el Presidente.
La iniciativa, de la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara, Dulce María Sauri Riancho, y Enrique Ochoa Reza, plantea que el Legislativo estableció en 1971 que el Consejo de Salubridad General debe rendir cuentas de su estrategia, con posterioridad, al Congreso de la Unión.
“Y en una emergencia sanitaria, como la que vivimos y ha modificado prácticamente todos nuestros aspectos de la vida, no tenga que dar cuenta de sus actos, cuando involucran acciones emergentes, de restricción de derechos humanos, de ejercicio del presupuesto público y de impacto de la vida y la salud de todos los mexicanos”, indica.
Con la propuesta, se busca considerar como parte de las medidas los recursos públicos destinados atender la emergencia, los planes de vacunación, la adquisición de insumos y vacunas; así como, los programas de apoyo a la sociedad.
Los informes periódicos ante el Congreso serían de manera trimestral, por escrito y comparecencias del titular de la Secretaría de Salud, y se presentarían ante las comisiones de Salud de ambas cámaras del Congreso o de la Comisión Permanente.
Para el caso de la declaratoria de emergencia por coronavirus, emitida por dicho consejo el 30 de marzo de 2020, la propuesta considera plantea que deberá enviar un informe que contenga la evaluación de las medidas sanitarias, incluyendo, en su caso, el plan o programa de vacunación, los recursos presupuestales dispuestos y los resultados obtenidos, al primer trimestre de 2021.
En la exposición de motivos, los legisladores del tricolor resaltan que México tiene una tasa de letalidad provocada por el virus, “muy superior a la media mundial de aproximadamente 11 por ciento, es decir de 11 personas de cada 100 infectadas”.
Resaltan que la falta de coordinación con los gobiernos estatales y municipales, con el sector de salud privado, y la sociedad civil, ha sido manifiesta, y no se han podido observar de manera homogénea ni de manera Nacional las recomendaciones del Consejo de Salubridad General y las previsiones para combatir la epidemia.
Además señalan que el avance de la vacunación “ha sido muy lento y poco estructurado, con un plan que nadie conoce a cabalidad y que no se ha cumplido con la efectividad, deseada y ni siquiera con la velocidad y alcance de otras naciones con menor desarrollo económico”.