Ciudad de México. El valor de los 12 equipos que se anunció originalmente integrarían la Superliga (algunos están en duda) asciende a 34 mil 362 millones de dólares, según el listado de este año de la revista Forbes. Lo que significa que si estos clubes fueran una sola entidad, ésta se ubicaría entre las 20 marcas más valiosas del mundo.
El poderío económico del Barcelona, Real Madrid, Manchester United, Liverpool, Manchester City, Chelsea, Arsenal, Tottenham, Juventus, Atlético de Madrid, Inter de Milán y Milán los ubica en la posición 17 de las 100 marcas más valiosas del mundo, por encima de firmas reconocidas como Visa y Walmart, que ocupan el sitio 19 y 20, respectivamente.
Estas 12 franquicias con sede en España, Inglaterra e Italia, están entre las 16 más caras del mundo en su género, que en conjunto cuestan 43 mil 645 millones de dólares.
Esto significa que los miembros de la nueva competición aportan 78 por ciento del total, mientras el 22 por ciento restante es aportado por el Bayern Munich, lugar tercero del mundo (4 mil 215 millones de dólares); PSG el nueve (2 mil 500 millones); Borussia Dortmund el 12 (mil 900 millones) y Everton el 15 (658 millones de dólares).
En tanto, los miembros de la Superliga se distribuyen de la siguiente forma: Barcelona en la primera posición con cuatro mil 760 millones de dólares; Real Madrid en el dos con cuatro mil 750 millones; Manchester United en el cuatro con cuatro mil 200 millones; Liverpool en el 5 con 4 mil 100 millones y Manchester City en el seis con cuatro mil millones.
Además, el Chelsea en el siete con tres mil 200 millones; Arsenal en el ocho con dos mil 800 millones; Tottenham en el 10 con 2 mil 300 millones; Juventus en el 11 con mil 950 millones, Atlético de Madrid en el 13 con mil millones, Inter de Milán en el 14 con 743 millones y Milán en el sitio 16 con 559 millones de dólares.
El martes se dio a conocer que el Manchester City no será parte de la nueva liga, además de que el Chelsea, Barcelona y Atlético de Madrid están en duda.
Los 12 clubes en conjunto tienen un valor superior al de marcas reconocidas a escala global como Netflix (26 mil millones de dólares), Starbucks (17 mil 800), Adidas (12 mil 900), Cerveza Corona (11 mil 400), Ford (11 mil 200), Heineken (9 mil 300) y Burger King (8 mil 200 millones de dólares), entre otras.
Según Forbes, estas 12 escuadras obtuvieron ingresos en 2020 por 6 mil 196 millones de dólares, cifra que se vio afectada por la pandemia de Covid-19, que ha provocado estadios cerrados en todo el mundo.
En cuanto al valor de las plantillas, es decir, el costo de los jugadores de cada club, el de las 12 escuadras, según el portal especializado Transfermarkt, asciende a 10 mil 626 millones de dólares; siendo la del Manchester City la más cara con un valor de mil 231 millones de dólares, seguida por la del Liverpool, con mil 207 millones y por la del Barcelona, con 983 millones de dólares.
El jugador más caro de estas plantillas es el delantero del Tottenham, Harry Kane, con un costo de 120 mil millones de euros, según Transfermarkt; seguido por Mohamed Salah, del Liverpool, 110 mil millones. Debido a su edad (33 años) Lionel Messi está en el puesto 20 con 80 mil millones.
No obstante, el jugador de futbol más caro del momento no pertenece a esos 12 clubes, que es el delantero francés Kylian Mbappé, que juega para el PSG.
En este contexto de altos valores, y ante las diferentes reacciones que ha habido en contra de la Superliga, los seis clubes ingleses que la integraban desertaron de ella.
Primero fue el Manchester City. Posteriormente se filtró que seguía el Chelsea, pero el anuncio vino en cascada hasta que se hizo oficial la salida de todos los equipos de la Liga Premier.
Este es un duro golpe al cisma que pretende el nuevo torneo con los clubes más poderosos de Europa.
El clima de rechazo en el Reino Unido fue abrumador, desde el gobierno de Boris Johnson, quien aseguró que echaría mano de todos los recursos contra el nuevo proyecto, los demás clubes del futbol inglés y la afición que salió a protestar contra “la codicia” de sus equipos.
"El primer ministro confirmó que el gobierno no permanecerá inactivo mientras un puñado de propietarios crean su pequeño club privado", apuntó el gobierno británico.