Ciudad de México. Con 348 votos a favor, 77 en contra y 32 abstenciones, la Cámara de Diputados aprobó esta noche la eliminación de la subcontratación en la que se encuentran 4.6 millones de trabajadores y representa pérdidas anuales al fisco por 324 mil millones de pesos así como de 21 millones de pesos para el IMSS.

De última hora se determinó que el gobierno federal tampoco podrá recurrir al outsourcing, y que tal medida no implicará un impacto presupuestal pues no se creará ninguna plaza adicional.

A favor del paquete de reformas votaron los legisladores de Morena junto a los de PRD, MC, PES, PVEM y PT. El PRI se dividió, la mayoría sufrago en abstención, unos cuantos a favor y tres en contra. La bancada panista votó en contra.

Al explicar el rechazo de Acción Nacional, el diputado Marco Adame señaló que estas reformas pondrán en riesgo el empleo de más de 4 millones de personas en el peor momento de la crisis económica derivada de la pandemia por Covid19.

Dijo que en su partido están de acuerdo en mejorar las condiciones de los trabajadores, pero con medidas viables y realistas, y no simuladas. Por lo demás, insistió en que la subcontratación es aceptada a nivel mundial.

Carlos Pavón Campos, del PRI, resaltó que lejos de beneficiar a los empleados, los va a perjudicar, entre otras razones porque pretende poner un tope máximo de tres meses para fijar las utilidades cuando hay empleados que por ese rubro obtienen entre 60 mil y 120 mil pesos. Entre ellos los del sector minero.

Estimó que el partido mayoritario tenía prisa por aprobar el proyecto para que el jefe del ejecutivo lo anuncie el próximo primero de mayo.

En contrapartida, Isaías González, igualmente del PRI, respaldo el proyecto. El también dirigente de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), dijo que el outsourcing no genera empleos, y afecta a los asalariados. Las reformas van a evitar que se sigan perjudicando los derechos laborales y el erario nacional.

Ante el señalamiento de los panistas en torno a que la inclusión del gobierno federal en la prohibición de la subcontratación tendrá un impacto presupuestal, el morenista Pablo Gómez presentó un documento elaborado por el Centro de Estudios de la Finanzas Públicas, el cual establece que no se tendrá ningún repercusión en las finanzas públicas ya que no implicará la creación de plazas adicionales.

Resaltó que el outsourcing genera la precarización del trabajo asalariado, lo que provoca un incremento en la tasa de explotación y una ganancia mayor para los empresarios. Pero vamos a salir de este “capitalismo voraz”, enfatizó.

Según las reformas aprobadas, se prohíbe la subcontratación, salvo la de servicios especializados distintos a la actividad económica de la empresa contratante, se fija un plazo de tres meses para que los empleados en outsoucing pasen a formar parte de la nómina del patrón real y se elimina la discrecionalidad en el cálculo del reparto de utilidades.