La presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, Nashieli Ramírez, afirmó que la deserción laboral y académica de niñas y mujeres aumentó en la emergencia sanitaria por Covid-19, principalmente por los estereotipos de género, la normalización de las violencias y las desigualdades que enfrentan.
El índice de violencia en el ámbito familiar se incrementó 4.6 por ciento el año pasado al registrase 22 mil 16 carpetas de investigación en la ciudad de México contra 21 mil 42 en 2019, pues “la violencia familiar es la que más padecen las mujeres en este país”, subrayó.
La deserción escolar de niñas y mujeres adolescentes representa además riesgos, como el hecho de incorporarse al trabajo infantil, el matrimonio, el aumento de brechas de desigualdad y la violencia familiar.
En el Foro Virtual “Conmemoración del Día Internacional de la Mujer 2021” destacó que la emergencia sanitaria también visibilizó la llamada crisis de cuidados, donde “hay que quitar su feminización, porque no es un asunto y no tendría que ser un tema sólo mujeres”.
La crisis del Covid “no puede estar resuelta sin todo lo que tiene que ver con la agenda de cuidados”, argumentó al señalar que las afectaciones al derecho a una vida libre de violencia de niñas y mujeres incide en el ejercicio de sus derechos a la educación.
Además del derecho al trabajo y a la igualdad, entre otros; y la caída del empleo en la actualidad afecta especialmente a las trabajadoras informales; deteriora sus condiciones laborales y profundiza las brechas de género, de vulnerabilidad y movilidad social.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre el Uso del Tiempo 2019 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), las mujeres alcanzaron 39.7 horas a la semana de trabajo no remunerado en el hogar, mientras que los hombres tuvieron 15.2.
Sin embargo, el último Índice Global de la Brecha de Género serán necesarios 202 años para cerrar la brecha económica mundial entre hombres y mujeres, comentó.