El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió el rescate a Pemex y la CFE por ser empresas de la nación. La protección de este tipo de empresas, expuso, “lo hacen en todo el mundo, protegen sus empresas estratégicas; sólo estos insensatos, corruptos, apostaron a destruir a estas dos empresas”, e indicó que su administración buscará que se reduzca el costo del servicio de deuda de Pemex luego que en gobiernos anteriores hubo una política sobre dejar a la empresa sin protección.
“Hacienda se dedicaba a exprimir a Pemex, le quitaban todo. Ahora no sólo se le está apoyando a Pemex, sino que está quedando de manifiesto que es una empresa del gobierno de la República, del pueblo de México”, señaló este lunes durante su conferencia de prensa.
Consideró que no se le puede dar el mismo trato a Pemex o a la CFE que a empresas privadas, “Ahora se les protege porque son empresas de la nación, de los mexicanos”. Ante la pregunta de la población sobre el beneficio de este tipo de políticas, afirmó que gracias a ello se evita que se incremente el precio de la gasolina, lo cual “es un ancla para que no haya inflación”, y que el salario no se deteriore, además de no haber pérdida en el poder de compra.
Tras apuntar que cuando Lázaro Cárdenas expropió el petróleo hubo una reacción conservadora, agradeció que “”afortunadamente el cambio se está dando de manera pacífica, y esto también tengo que agradecerlo a nuestros adversarios, que no pasan de los artículos o los comentarios” en medios de comunicación.
A la vez, reiteró que frente a las críticas, “por encima de todo está la libertad, no se va a censurar a nadie, no somos iguales. Lo único es que vamos a ejercer nuestro derecho de réplica y no vamos a comprar voluntades. Pero somos libres, completamente libres, no se puede limitar la libertad de expresión”.
También reiteró su respeto por la posición de la iglesia católica y todas las iglesias en el país.