Los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) involucrados en la muerte de ciudadano de Guatemala, ya fueron puestos a disposición de la Fiscalía General del Estado de Chiapas (FGECH), a quien le corresponde la investigación de los hechos, confirmaron fuentes del gobierno federal.
Reconocieron que hubo una “reacción indebida” por parte del uniformado que accionó su arma, y que debido a que se trata de un caso del fuero común, que tiene como víctima a un civil, se aplica el artículo 57 del Código de Justicia Militar, y serán las autoridades civiles de Chiapas quienes deslindarán las responsabilidades respectivas.
Insistieron en que todos los hechos, tanto el homicidio del ciudadano guatemalteco como la retención de los soldados por parte de sus acompañantes, sucedió en territorio mexicano, “todo ocurrió en México”, sostuvieron, dentro del ejido San José Bacatún, del municipio Motozintla, que limita con la frontera sur.
Por la mañana, en Palacio Nacional, el titular de la Sedena, Luis Cresencio Sandoval González, también reconoció que hubo una “reacción errónea” por parte de los militares mexicanos, quienes fueron retenidos por otros ciudadanos guatemaltecos y liberados la madrugada de este martes, para ponerlos a disposición de las autoridades mexicanas.