Ciudad de México. El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, pidió que caiga todo el peso de la ley contra quienes mataron a su compatriota Victoria Esperanza Salazar Arriaza en Tulum, Quintana Roo, el sábado pasado.

Sólo pedimos justicia, afirmó el mandatario en un mensaje en su cuenta de Twitter la noche del domingo. Aseveró que fueron “unos criminales" quienes mataron a Salazar Arriaza.

Bukele señaló que ve a miles de mexicanos indignados, exigiendo justicia para nuestra compatriota. Ellos están igual de indignados que nosotros. Que no se nos olvide que no fue el pueblo mexicano quien cometió este crimen, sino unos criminales en la policía de Tulum, puntualizó.

En un tuit publicado la noche del lunes, afirmó que hay más agresores en este caso, también más víctimas. No todos los culpables están arrestados aún, alertó.

El mandatario aseguró que su gobierno se encargará de las dos menores que quedaron huérfanas tras la muerte de la mujer.

En Tulum, activistas recriminaron que el alcalde de esa localidad, Víctor Más Tah, desconozca el paradero de las hijas de Salazar.

En entrevista, el edil perredista reconoció que no sabe dónde se encuentran las adolescentes, ni sus edades ni su estatus migratorio. Argumentó que en Tulum residen muchos centroamericanos.

Mariana Bello, integrante del Observatorio de la Violencia, consideró que ese desconocimiento del presidente municipal es imperdonable porque ya pasaron dos días desde que se perpetró el feminicidio.

Subrayó que es urgente localizar a las menores para su resguardo y custodia, y sobre todo para garantizar su integridad.

En tanto, el homicidio de Salazar Arriaza provocó indignación entre los partidos políticos.

La dirigencia nacional de Morena expresó: Condenamos y nos unimos a la exigencia de justicia por el feminicidio de Victoria Salazar en Tulum.

A su vez, la del Partido del Trabajo manifestó: Ante este hecho negligente se debe castigar a los responsables conforme a la ley, pero la justicia debe ser expedita y ejemplar para asegurar que no se repitan agresiones contra los ciudadanos, incluidos los migrantes.