Monterrey, NL. Más de ocho mil hectáreas de la sierra de Santiago han sido consumidas por el fuego, luego de que esta madrugada el incendio forestal que se registra en la zona desde el 13 de marzo se extendiera.
Más de mil 100 personas fueron desalojadas de diversas comunidades de la zona, pues las llamas comenzaron a extenderse por los vientos de hasta 90 kilómetros por hora que se registraron durante la noche del miércoles y la mañana de este jueves.
El gobierno del estado refirió que decenas de personas fueron llevadas a las instalaciones del hotel “Cola de Caballo”, y el Club de Leones de Santiago, habilitados como refugio para resguardar a los habitantes de las comunidades afectadas; además, reiteró que hasta anoche estaba prohibido el acceso a la zona.
"Tras realizar la evacuación de mil 100 personas de al menos 14 comunidades, se implementan acciones para evaluar daños tras la devastación de más de ocho mil hectáreas durante esta madrugada", informó Protección Civil estatal por medio de un comunicado.
"Esta madrugada se realizó un operativo para mantener la integridad de las personas ante la amenaza de incendio forestal y el denso humo que provocaron las ráfagas de vientos de hasta 90 km/h. El miércoles por la tarde, el viento arreció al punto que las operaciones aéreas para combatir el incendio fueron suspendidas.
Habitantes de al menos 14 comunidades fueron evacuados y trasladados a los refugios habilitados por Protección Civil. Foto cortesía Gobierno de Nuevo León
La corporación también refirió que "una fuerza de tarea lleva a cabo, desde primera hora, acciones de evaluación de daños en las comunidades afectadas", al tiempo que dio a conocer que instaló filtros en las comunidades Puerto Genovevo, San José de Las Boquillas, El Tejocote y El Rodeo, y que su centro de mando quedó ubicado en la Cola de Caballo
Las comunidades desalojadas son Lagunillas, El Hondable, El Pinal, El Tejocote, La Camotera, Rincón del cenicero, El Charro, Laguna de Sánchez, El Alto, San Isidro, San Juan, Laborcitas, Cañón del Álamo y Ciénega de González.
