Tijuana. Xolos se cebó en el inicio del partido donde derrotó 3-1 al Querétaro en la Liga Mx. Nadie supo de qué se trataron los primeros siete minutos con tres goles, todos de Xolos, incluso uno en contra. Aquello fue un delirio sin explicación.
El primero llegó sorpresivo, un minuto y 40 segundos, tras centro de Christian Rivera al área para que Fidel Martínez empujara de un testarazo. Ni siquiera estaban bien ubicados en sus posiciones todos los jugadores.
Pero aquello fue una locura y al 4, llegó el segundo gol. Martínez filtró al área y Mauro Manotas definió con la derecha. Los jugadores de Gallos estaban con la mandíbula en el suelo, sin saber qué ocurría o cómo contener a los fronterizos.
Y tanta era su ansia de seguir anotando, que el defensa de Xolos quiso Víctor Guzmán quiso recortar la trayectoria de un balón y la metió en su propia portería. Maldijo por el error. Pero era otro gol aportado por el huracán fronterizo.
Y la media hora, para no esperar tanto, otra vez anotó Martínez, ahora desde afuera del área. Un tanto que tuvo parte de mérito en el delantero y en el error de Gil Alcalá, portero del Querétaro, recibió la pelota a las manos, inofensiva, pero se le salió de control directo a su meta. Un gol imperdonable.
Al final no cayeron, ya para qué, pero anularon dos tantos por fuera de lugar, uno de cada lado.