Ciudad de México. La Arquidiócesis Primada de México emitió criterios pastorales para la conmemoración de la Semana Santa, en el contexto del Covid-19.

El cardenal Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México detalló en un documento de cinco páginas las directrices y señaló que éstas son “de acuerdo a lo emitido por la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), en relación con orientaciones acerca de la celebración de la Semana Santa durante pandemia por Covid-19, así como a las medidas adoptadas por los obispos que presidimos las diócesis de la Provincia de México”.

Destacó que las celebraciones litúrgicas estarán sujetas a la situación sanitaria de cada parroquia. “En la mayoría de ellas se podrá realizar con presencia reducida de fieles y en otras tendrá que ser celebrada a puerta cerrada. En ningún caso se permitirá las celebraciones públicas multitudinarias de piedad popular”.

La demarcación religiosa recomendó que se debe poner “todo el empeño posible en celebrar con dignidad y decoro” el denominado Triduo Pascual, esto es los días más importantes de la Semana Santa, los que conmemoran la pasión, muerte y resurreción de Jesús.

“Pedimos que la presencia de los fieles se privilegie en estas celebraciones centrales del misterio pascual, siempre guardando las normas sanitarias necesarias que hemos venido aplicando hasta hoy”.

Precisó que cuanto las instalaciones lo permitan, se recomienda hacer las celebraciones en los espacios abiertos que ofrecen los atrios parroquiales. En caso de realizarse dentro del templo, se respetará el aforo permitido por las autoridades. Tanto en los atrios, como en los templos, se han de seguir las normas de higiene, tales como uso de cubrebocas, sana distancia y de alcohol-gel.

Destacó que dado que “la mayoría de nuestros fieles no podrán asistir de manera presencial, animamos a los párrocos y rectores a que aprovechen el uso de los medios de comunicación social para acercarse a todas las familias y enfermos que no puedan estar presentes”.

Sobre las expresiones de piedad popular y procesiones, “pedimos que se hagan en el templo o de ser posible en el atrio, con la asistencia permitida de fieles y con el uso de los medios digitales de comunicación para su difusión. Se han de evitar las aglomeraciones en todo momento”.

Informó que la Misa Crismal se celebrará el viernes 26 de marzo a las 11 horas en la Basílica de Guadalupe, siguiendo los protocolos sanitarios que la autoridad competente determine.

La tarde del jueves santo se transmitirá una Hora Santa desde capillas de hospitales y “el Viernes Santo se celebrará el Vía Crucis desde algún lugar significativo en el que

reconozcamos a Cristo crucificado”.

El Domingo de Ramos será al interior de los templos, posiblemente en la puerta de entrada, u otro lugar fuera del presbiterio.

En el Viernes Santo “los sacerdotes de una parroquia pueden celebrar la Pasión del Señor en la iglesia parroquial. Antes de iniciar la celebración de la Pasión del Señor, especialmente si la celebración es con presencia de los fieles, el sagrario deberá estar vacío, se orará “por todos los que sufren las consecuencias de la epidemia actual: para que Dios Padre conceda la salud a los enfermos, fortaleza al personal sanitario, consuelo a las familias y la salvación a todas las víctimas que han muerto”.

El Domingo de Pascua y la Vigilia Pascual se realizarán en los templos con la medidas sanitarias.