Panamá. Panamá, El Salvador y Honduras se comprometieron el miércoles a seguir los pasos de los demás países de Centroamérica para reanudar de forma urgente y gradual las clases presenciales en una región donde se estima que entre 11 y 12 millones de niños siguen fuera de las aulas.
El compromiso se estampó en una declaración del Consejo de Ministros de Educación de los países del Sistema de Integración Centroamericana (SICA), del cual también son miembros Belice y República Dominicana, y que fue divulgada en un comunicado conjunto fechado en Panamá por UNICEF, UNESCO y el SICA.
"Es evidente que cada día más de cierre de las escuelas pone más en riesgo la educación de los niños y las niñas, especialmente de aquellos que no tienen acceso a Internet y no cuentan con el apoyo de sus padres y madres en la casa”, dijo Jean Gough, directora regional de UNICEF para América Latina y el Caribe. "Centroamérica no puede perder un segundo año escolar sin clases presenciales”.
En el documento no se establecieron fechas para la reapertura de las escuelas en esos países, aunque se consideró una medida de alta prioridad tras advertir que mientras más tiempo se prolongue el cierre menos probable será la vuelta a clases de los más vulnerables, como los indígenas, migrantes y estudiantes con discapacidad.
Nicaragua mantuvo sus escuelas abiertas pese a la pandemia, mientras que Costa Rica y Guatemala las reabrió parcialmente este año. El Salvador se prepara para reanudarlas de forma semipresencial la primera semana de abril, en tanto que Panamá evalúa hacerlo en algunas regiones con bajo niveles de contagios de COVID-19.pan