Ciudad de México. Como consecuencia del encarecimiento de la gasolina, varios de los alimentos básicos que consume la población mexicana han sufrido importantes incrementos en su precio durante el último mes, algunos de hasta 80 por ciento, así lo reveló la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec).
De acuerdo con el monitoreo mensual del organismo, de mediados de febrero a la fecha, el precio del kilogramo de limón se disparó 81 por ciento, mientras que el del aguacate lo hizo en 80 por ciento.
Además, el kilo de chile serrano incrementó su precio en 42 por ciento, el del frijol en 57.5; el del jitomate en 57, el de las lentejas en 50, el del azúcar en 23, el del huevo en 16, el de la tortilla en 11 y el de la harina de trigo en 5.5 por ciento.
En términos generales, destacó la Anpec, la inflación en la canasta básica registró un incremento mensual de 4 por ciento.
Cuauhtémoc Rivera, presidente de Anpec, destacó que el alza en el precio de los alimentos es reflejo del incremento de las gasolinas, cuyo costo rebasa los 20 pesos por litro, factor que encarece el abasto y suministro de los productos en el mercado nacional.
Otros factores que animan este proceso inflacionario, apuntó el dirigente, es la inestabilidad de la paridad del peso frente al dólar, el factor estacional y las restricciones comerciales por la pandemia de Covid-19.
“Este coctel genera las condiciones para la carestía de la vida en México; no es un asunto menor, al contrario, es un foco amarillo en la agenda nacional”, advirtió.