Ciudad de México. El gobierno mexicano recordó al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, “conducirse de acuerdo a sus facultades” y evitar posicionamientos que intentan tener injerencia en los asuntos internos del Estado Plurinacional de Bolivia, cuyo gobierno de Luis Arce fue elegido democráticamente.
Efraín Guadarrama, director general de Organismos y Mecanismos Regionales Americanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y coordinador nacional de México ante la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) –cuya presidencia pro témpore recae en nuestro país— censuró el nuevo intento de Almagro por intervenir en lo resuelto por las autoridades bolivianas con la detención de Jeanine Áñez, quien encabezó el gobierno de facto tras el golpe de Estado en esa nación.
Ayer, el secretario general de la OEA se dijo “preocupado” por la aprehensión de Áñez, quien está acusada de haber ayudado a fomentar un golpe de Estado contra el gobierno socialista del derrocado presidente Evo Morales Ayma. Esto a través de Twitter, donde también difundió pronunciamientos de organizaciones civiles.
“Hacemos un recordatorio a la secretaría general de la @OEA_oficial para conducirse de acuerdo a sus facultades, fomentando el diálogo, el consenso y la solución pacífica de las controversias en el hemisferio, y no polarizando a la ya dividida organización”, señaló esta tarde el funcionario de la cancillería mexicana, también en un tuit, el cual fue compartido por el titular de la dependencia, Marcelo Ebrard Casaubón.
Guadarrama agregó que el exhorto a Almagro incluye el evitar aquellos posicionamientos que busquen tener injerencia en los asuntos internos de Bolivia.
“La secretaría general debe atender la naturaleza colegiada de su mandato y abstenerse de confrontarse con un gobierno electo democráticamente como es el boliviano”.
Es de recordar, que en noviembre de 2019, Almagro jugó un papel preponderante durante la actuación de una misión de observación electoral de la OEA que denunció prematuramente un supuesto fraude ante el triunfo de Evo Morales Ayma, proceso que a la postre generó una crisis social en ese país que derivó en un golpe de Estado que llevó al mandatario a presentar su dimisión.
En diversas ocasiones, el gobierno mexicano ha censurado esa intervención de Almagro y nuevamente lo conminó a evitar una nueva injerencia.