Islas Marías. Conservar la geografía y modificar el significado histórico del archipiélago de las Islas Marías, son el centro del Proyecto Integral Islas Marías, que el presidente Andrés Manuel López Obrador sostiene para dar sustentabilidad al medio ambiente.
Este sábado, en una reunión en la isla María Mayor se ratificó el compromiso de la administración federal, por otorgarle un rostro distinto a la ominosa represión del Estado, levantada en barracas y residencias inclementes, durante más de un siglo.
Cerrar la prisión y abrir la puerta a la expresión de la cultura y la protección del medio ambiente, es la premisa del proyecto de las Islas Marías, adujo el mandatario.
En el territorio donde el Estado y sus autoridades imponían penas indescriptibles a presos políticos, entre ellos José Revueltas, y delincuentes comunes, el presidente también otorgó la constancia de gobernanza del archipiélago al capitán, Jesús Salvador De Olaguibel, quién dependerá de la Secretaria de Marina.
En el centro cultural “Muros de Agua”, donde se rescataron murales elaborados por artistas que purgaron penas en la prisión, el tabasqueño ponderó la decisión que se tomó en marzo de 2019, por cerrarla. Y también anunció que se ha terminado la primera etapa de rehabilitación de los espacios, con objeto de darle atractivo al sitio.
“Ya está muy bella la Isla Madre, es un espacio excepcional para el disfrute de la naturaleza”, repuso.
También, adujo que su propósito es que en julio próximo sé de resolución al sistema de transporte marítimo que habrá de operar entre la Isla Madre y los puertos de Mazatlán, San Blas y Puerto Vallarta. Ya sea con el armado de naves en la Secretaría de Marina o la adquisición de estas. En aquel mes volverá para dar el banderazo de la nueva etapa histórica del archipiélago.
“No siempre tenemos la oportunidad de estar en las Islas Marías como ahora, imaginen lo que estaría pensando José Revueltas. Se está cerrando una prisión, para abrir un espacio para la redención de la cultura.”
¡Imagínense qué pensaría José Revueltas sobre este proyecto llamado como su novela 'Muros de Agua'! Leerla y visitar el sitio, también es recordar a Mandela y su autobiografía 'Un largo camino hacia la libertad'. pic.twitter.com/1K3vi6cw6N
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) March 14, 2021
Este sábado, llegar a la ínsula también significó perder la comunicación con el resto del país durante ocho horas. La experiencia es sinigual: se advierte la historia de sentimientos humanos que se expresaron durante décadas, y la biosfera imponente de 650 mil hectáreas, de ellas 20 mil terrestres y el resto marítimas.
De un año y medio a la fecha, el rostro de la se ha modificado: calles remozadas, la iglesia restaurada, el jardín Benito Juárez también se haya concluido, el tianguis de artesanías es, también obra terminada.
La dificultad para llegar a la isla mayor, derivada de una pista de aterrizaje excesivamente corta hasta para aviones de hélice, el viento -casi siempre en contra-, y las bolsas de aire caliente que al medio día producen inestabilidad y turbulencia, fue subsanada por la eficacia del personal de la Secretaría de Marina, que atendió a los periodistas, escasos invitados y funcionarios que se movilizaron a la ínsula. Incluso tras el aparatoso aterrizaje de uno de los aviones, bromeaban para calmar a quienes les dio desazón.
Las condiciones de vivir en una celda de dos por dos metros, a causa de lo que pensaban fue descrita José Revueltas, -acusado de comunista- en su novela “Los Muros de Agua”. Él fue el más notable recluso en la prisión que ordenó levantar Porfirio Díaz para mantener a raya a los críticos y opositores de su régimen.
De penosa memoria colectiva a lo largo de 114 año, el penal-isla encerró en total a aproximadamente 45 mil personas que llegaban en dificultosa travesía por mar, acusados por los delitos más inverosímiles como la vagancia, el robo de alimentos, o en muchos casos sin sentencia.
Con esa historia a cuestas la Isla Mayor también albergó en sus límites casi infranqueables a personajes siniestros como “el sapo” un multiasesino, a quien se le atribuyeron -no menos de 150 homicidios, y cuyo fin estuvo a cargo de sus compañeros de reclusión. También fue prisionera Concepción a quien se le atribuyó la autoría intelectual del homicidio de Álvaro Obregón.
Con la determinación de López Obrador, a las Islas Marías se les arrancó el estatus de sitio indeseable, y se comenzó a construir una narrativa nueva, asociada a la educación y el compromiso de la preservación de la naturaleza.
Así, los muros de agua que José Revueltas describió durante los dos encierros allende el mar entre 1932 y 1935, se conservarán en su letra impresa, en un proyecto integral de atracción turística y educativa donde convergen las secretarías de Marina, Medio Ambiente, Turismo, la CONANP y el gobierno de Nayarit.