San Cristóbal de Las Casas, Chis. Estudiantes de la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach) instalaron un plantón en la entrada principal de esa casa de estudios para exigir el cumplimiento de un pliego petitorio enviado en días pasados al rector Carlos Natarén Nandayapa, en el contexto de las protestas por la muerte de la pasante de medicina, Mariana Sánchez Dávalos, hallada sin vida el 28 de enero en la comunidad de Nueva Palestina, municipio de Ocosingo.
Los inconformes demandan respeto a sus derechos y garantías de seguridad para la prestación del servicio social;así como atención urgente de alumnas y alumnos que hayan denunciado hechos que atenten contra su dignidad e integridad física y emocional en sus sedes de pasantes, para que sean removidas/os mediante asignación o permuta, entre otros puntos.
De acuerdo con fuentes de la Unach, el plantón fue instalado la noche del jueves después de una marcha y participan “unos 10” estudiantes.
La secretaria general de la Unach, María Eugenia Culebro Mandujano, informó que la marcha de la noche del jueves fue "pacífica" y asistieron unos 120 jóvenes, pero al llegar al campus universitario un grupo de "alrededor de 50 personas, ingresó de forma violenta, con marros y cinceles y rompió los candados del acceso principal, que se encuentra cerrado, debido a que las actividades académicas y administrativas se desarrollan de manera virtual” por la pandemia.
Luego de condenar cualquier expresión violenta, la funcionaria afirmó que se atienden los compromisos asumidos, pues el rector Natarén Nandayapa ya "firmó en respuesta al pliego petitorio y anexos de las colectivas feministas universitarias".
Señaló que como parte de los acuerdos se avanza en la agenda de género, y "se ha suspendido profesores señalados como acosadores Estamos trabajando muy de la mano, y gracias a la ayuda del Instituto de Mujeres, en el nuevo protocolo de actuación ante el acoso".
Culebro Mandujano insistió en que continúa abierta la invitación a toda la comunidad universitaria que desee colaborar "en hacer esta institución un espacio totalmente libre de cualquier forma de violencia".
Los colectivos feministas de la universidad exigen también la admisión de un nuevo protocolo de acción contra el acoso que se ajuste a necesidades y realidades que viven sus compañeras dentro del ambiente estudiantil.
En su opinión, para este nuevo protocolo se deben tomar en cuenta los antecedentes de "la ineficacia" del protocolo actual ante casos como el de Mariana y "los tendederos" del acoso que se realizaron en diferentes facultades.
