Ciudad de México. Las agresiones contra personas defensoras del medio ambiente es un grave problema en América Latina y el Caribe, ya que más de 50 por ciento de los asesinatos de ecologistas a nivel mundial ocurrieron en la región, señaló Camila Zepeda Lizama, directora general de Temas Globales en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Si bien la funcionaria no hizo referencia a los casos registrados en México, cabe señalar que entre 2012 y 2019 el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda) denunció casi 500 ataques y 83 asesinatos en contra de defensores de los ecosistemas.
En el foro virtual Acuerdo de Escazú indicó que “un punto relevante para Latinoamérica es reconocer el alto número de atentados a la integridad de defensores ambientales”, quienes han alzado su voz para defender sus derechos, entre ellos el acceso al agua y al saneamiento.
“Hay que reconocer que tenemos una problemática en la región y hay atenderlo, y que un compromiso de esta naturaleza (el Acuerdo de Escazú) es una vía para buscar acelerar los mecanismos de protección”, subrayó.
En este sentido, Zepeda Lizama destacó que el Acuerdo de Escazú es el primer instrumento en crear compromisos vinculantes para la protección de personas defensoras de derechos humanos en materia ambiental.
Explicó que ese mecanismo está conformado por 26 artículos que contienen un enfoque de derechos humanos y reconoce los derechos de acceso a la información, a la participación pública y a la justicia en los asuntos ambientales.
Entre estos cabe mencionar también el derecho a la protección a defensores del medio ambiente. De ahí su relevancia, ya que el Acuerdo de Escazú es el primer tratado internacional en el mundo que aborda esta problemática.
Ese instrumento regional derivó de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible, conocida también como Río+20, en la que 24 países firmaron la Declaración.
México suscribió el documento en septiembre de 2018 y el 22 de enero de 2021 el gobierno depositó ante la Organización de las Naciones Unidas el instrumento de ratificación, con lo cual se logró el número de países necesarios para que entre en vigor el próximo 22 de abril, Día Internacional de la Tierra, sumando 12 los países que lo han ratificado.