Ciudad de México. La Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México anunció el endurecimiento del Programa Conduce Sin Alcohol, conocido como Alcoholímetro, con el que los acompañantes de conductores que rebasen 0.40 grados de alchohol en la sangre no podrán llevarse el vehículo que será enviado al corralón.
La unidad será devuelta al conductor hasta que haya cumplido con la penalización que imponga el juez cívico en el Centro de Sanciones Administrativas y de Integración Social, El Torito, además de que el conductor tendrá que cubrir las multas pendientes que registre el vehículo para poder liberarlo.
La SSC indicó que con las nuevas disposiciones se faculta al personal operativo para que pueda hacer la revisión documental completa del vehículo y, en su caso, infraccionar al conductor en caso de que no cuente con los documentos requeridos para manejar el automóvil.
Adicionalmente, la dependencia recordó que desde diciembre pasado se reforzó el estado de fuerza en 30 por ciento para garantizar la correcta operación en cada punto de revisión del Alcoholímetro, así como la incorporación de más grúas para los arrastres necesarios.
Las reformas al Reglamento de Tránsito fueron publicadas este jueves en la Gaceta Oficial del Gobierno de la Ciudad de México, con la que la SSC expuso que las nuevas sanciones “están encaminadas a combatir la impunidad en materia de seguridad vial e inhibir conductas de riesgo, con el objetivo de proteger a las personas usuarias de la vía más vulnerables”.
Las modificaciones evitarán la discrecionalidad en las sanciones aplicadas a los posibles infractores para se hagan de acuerdo con el tabulador, es decir que el monto de las multas no quedará a a criterio de los policías por faltas al Reglamento de Tránsito.