Ciudad de México. La reapertura de centros comerciales el próximo 8 de febrero se traduce en 5 mil millones de pesos en impuestos que deja esta actividad cada mes sólo en la Ciudad de México, aseguró María José Fernández, directora general de Asociación de Desarrolladores Inmobiliarios (ADI).
En entrevista, explicó que mantener cerrado estos espacios implicaba pérdidas por 25 mil millones de pesos al mes y el riesgo de perder algunos de los 360 mil empleos formales que hay en el sector. “Es muy importante poder abrir, estamos pasando un momento muy complicado”, recalcó.
Por lo pronto, luego de que el 1 de febrero abrieron los centros comerciales del Estado de México — aún con el semáforo rojo por la pandemia de Covid-19— el próximo lunes 8 se hará lo mismo en la Ciudad de México. El aforo máximo será de 20 por ciento.
“Para nosotros es muy importante poder abrir con un 20 por ciento porque esto por lo menos va a echar a andar la cadena de valor de un centro comercial”, declaró Fernández.
En ese sentido, recalcó que, si bien antes de cerrar el 18 de diciembre ya se tenían medidas para evitar contagios por Covid-19, ahora los protocolos serán más estrictos. Se harán pruebas rápidas a operadores de piso, se hará obligatorio el registro de QR para quienes ingresen, se reforzarán los filtros de acceso, dijo.
También subrayó que nadie podrá entrar sin cubrebocas, estarán cerradas las zonas infantiles y ludotecas, se promoverá la venta en línea para sólo recoger la mercancía y aunque sólo podrán abrir los restaurantes con terraza, se busca también el diálogo con las autoridades para adoptar otros espacios de comida en áreas extensas.
“La gente va a poder ir de manera segura, que cumpla (con las medidas sanitarias), que no lo sienta como una imposición, sino como una forma de participar en el cuidado de todos”, recalcó.