Tegucigalpa. El Congreso Nacional de Honduras ratificó este jueves las reformas a los decretos constitucionales 67 y 112, que prohíben la legalización del aborto y el matrimonio igualitario. Ambas fueron aprobadas el pasado 21 de febrero por el Legislativo.
El ente informó en su cuenta de Twitter sobre la ratificación y detalló que se dio con 90 votos a favor. Los 128 diputados que integran el Poder Legislativo se reunieron de manera virtual como una medida de prevención ante la crisis sanitaria generada por el coronavirus.
El artículo 67 de la Constitución de Honduras establece que “Al que está por nacer se le considerará nacido para todo lo que le favorezca dentro de los límites establecidos por la ley". Con la reforma se le hizo el agregado: “Se considera prohibida e ilegal la práctica de cualquier forma de interrupción de la vida por parte de la madre o un tercero al que está por nacer, a quien debe respetarse la vida desde su concepción”.
La actualización también indica que lo dispuesto en ese artículo sólo podrá reformarse por una mayoría de tres cuartas partes de los miembros del Pleno del Congreso Nacional y que sus disposiciones no perderán vigencia o dejarán de cumplirse cuando sea, supuestamente, derogado o modificado por otro precepto constitucional. Por último, señala que “serán nulas e inválidas las disposiciones legales que se creen con posterioridad a la vigencia del presente artículo que establezcan lo contrario”.
Entre tanto, al apartado que habla del derecho al matrimonio, contenido en el capítulo tres que se refiere a los derechos sociales, se le hizo el agregado: "Lo dispuesto en este Artículo (112) sólo podrá reformarse por una mayoría de tres cuartas partes de los miembros del Pleno del Congreso Nacional. Serán nulas e inválidas las disposiciones legales que se creen con posterioridad a la vigencia del presente Artículo que establezcan lo contrario”.
Con lo anterior se deja cerrada la posibilidad que el matrimonio entre dos personas del mismo sexo sea aprobado en un futuro.
En días recientes, varias organizaciones hondureñas defensoras de los derechos de la mujer se mostraron en contra de esas reformas a las que calificaron de aberraciones jurídicas que, a su criterio, violentan los derechos de las féminas. Incluso la Organización de Naciones Unidas (ONU) expresó su preocupación por esa reformas.
“La ONU reitera que esta reforma constitucional contraviene las obligaciones internacionales en materia de derechos humanos, pues impide el abordaje de un problema de salud pública que la penalización del aborto en todas sus modalidades ya provoca. De igual modo, dicha reforma podría aumentar la situación de desigualdad y discriminación por razones de género en el país”, detalló un comunicado.
“En lo que respecta al matrimonio igualitario, el sistema de Naciones Unidas en Honduras lamenta que, en el decreto aprobado, sean restringidos los derechos de una persona a partir de su orientación sexual, su identidad de género y/o su expresión de género, contraviniendo la Opinión Consultiva 24/2017 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, y el principio de progresividad y no regresión de derechos humanos, afectando a dos colectivos tradicionalmente vulnerables: mujeres y personas LGBTI”, apuntó con respecto al matrimonio.