Acapulco, Gro. El regreso al color rojo del semáforo epidemiológico afectará a diversos sectores.
El presidente de la Coalición de Asociaciones Turísticas de Acapulco, David Abarca Rodríguez, sostuvo que hace falta que autoridades tomen medidas más enérgicas para hacer entrar en razón a la población del peligro que presenta el Covid-19.
Abarca Rodríguez propuso un confinamiento obligatorio a la ciudadanía de 15 días, para contrarrestar los peligros del virus, o una especie de toque de queda en el puerto.
Señaló que debido a vivir actualmente en tiempos electorales, los gobiernos no se atreven a tomar decisiones que tal vez parezcan dolorosas, pero que en el largo plazo benefician al sector económico.
Abarca Rodríguez criticó que no se ha aplicado un plan formal de ayuda empresarios y prestadores de servicios en general, y planteó que se deben implementar acciones más drásticas pensando en el próximo periodo vacacional de Semana santa, pues de entrada, no podrá haber reactivación económica en los próximos fines de semana, al menos hasta pasando el 14 de febrero, cuando autoridades evaluarán si permanece el color rojo del semáforo epidemiológico.
Por separado, el representante de restauranteros de las playas de Caleta y Caletilla, José Luis Laredo Vargas, subrayó que es más importante la salud que la economía, por lo que avaló que autoridades estatales hayan decretado el regreso al color rojo del semáforo epidemiológico el pasado 27 de enero por la tarde.
Sin embargo, subrayó que hace falta que el gobierno sea más enérgico, pues aunque prestadores de servicios acaten las recomendaciones higiénicas, no hay quien haga a los visitantes entrar en razón.
El restaurantero planteó que el gobierno sea más estricto, que incluso se apliquen medidas como en otros países y solicitar a turistas certificados de no Covid.
Indicó que “se debe exigir a las entradas a la ciudad, poner más filtros, si vamos a estar trabajando al 30 por ciento de capacidad, pues que no dejen entrar a más gente”.
Laredo Vargas alertó que ya hay temor entre prestadores de servicios de la zona Tradicional.
Manifestó que “nos da mucho temor, en la actualidad hay muchos contagios, en Caleta y caletilla ya hay contagios, ya hay compañeros enfermos, meseros, vendedores ambulantes que están enfermos y esa es la preocupación más grande que tenemos”.
Ejemplificó que las masajistas no saben en realidad el estado de salud de los turistas que atienden, por lo que se convierten en fuente de contagio, y se vive una situación complicada.
Mientras que propietarios de gimnasios de Acapulco lamentaron que autoridades nuevamente hayan decretado el color rojo del semáforo epidemiológico.
Reprocharon la falta de apoyo a microempresarios en el contexto de la pandemia del Covid-19.
Alejandro Rodríguez, quien administra un gimnasio en el zócalo de Acapulco, advirtió que tuvo que dar de baja a 12 instructores, pues las clases no pueden ser reactivadas y los clientes han disminuido hasta 80 por ciento.
Entrevistado al mediodía, expresó que “en estos momentos solamente hay dos personas. Ha bajado bastante la clientela, este gimnasio vivía del acondicionamiento, de la natación, del atletismo, del baile, de la bicicleta estática, las escaladoras, mi fuerte no son las pesas, yo soy deportista de alto rendimiento”.
Alejando Rodríguez enfatizó que “había trabajo para todos, pero ya no, aquí ya nada más sobrevivimos para ir pagando en abonos todo, agua, renta, luz, y ahorrar lo más que se pueda, los mejores tiempos han pasado hasta que se componga esto, hasta que pongan la vacuna”, y subrayó que no se puede dejar de pagar la renta, o de lo contrario pierde su local.
Por separado, Ángel Castro, propietario del gimnasio Colombia Fitness, detalló que debido a la crisis económica generada por la pandemia del Covid-19, tuvo que cambiar de sede, de la avenida Universidad a La Laja, y despidió a tres instructores.
Manifestó que “también nosotros estamos en números rojos, nuestros ingresos han bajado como nunca y no hemos recibido ningún apoyo”.
Recalcó que la mayoría de los gimnasios han cumplido con los protocolos, como ha sido constatado en operativos en los que participan las fuerzas armadas.
Ángel Castro reprochó que las autoridades hayan sido laxas al momento de aplicar las reglas sanitarias durante la pasada temporada vacacional decembrina, por lo que en lugar de ayudar, al final el periodo de receso terminó perjudicando a diversos sectores, ahora que se ha decretado el semáforo rojo.