Moscú. El Kremlin dijo este martes que "no tomará en cuenta" los pedidos de Occidente para liberar al opositor ruso Alexéi Navalny y afirmó que los llamados de éste a protestas masivas eran "ilegales".
"Es un asunto completamente interno y no permitiremos que nadie se meta adentro", declaró a la prensa el vocero del Kremlin Dmitri Peskov.
"No podemos y no vamos a tomar en cuenta esas declaraciones" hechas en Berlín, París, Washington, Bruselas y Londres pidiendo la liberación de Navalny, estimó Peskov.
El portavoz denunció además los "preocupantes llamados" del opositor, detenido al regresar el domingo a Rusia, a manifestantes masivas el sábado.
"Esto podría sin dudas ser objeto de un análisis para determinar si no se trata de llamados a acciones ilegales", indicó.
Cualquier manifestación en Rusia necesita un acuerdo de las autoridades. Además, en una gran parte del país, incluyendo Moscú, las reuniones masivas están prohibidas por la pandemia.