En videoconferencia, explicó que en este esquema, denominado atención especializada Covid en casa
, se trabaja de manera coordinada con el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) e incluye asistencia médica remota las 24 horas, oxígeno, medicamentos, termómetro, baumanómetro, oxímetro y estudios de laboratorio.
De lo que se trata, explicó la secretaria de Salud capitalina, Oliva López Arellano, es captar en los kioscos de salud y áreas triage de los hospitales de la dependencia, pacientes con cuadros moderados
de Covid-19.
Si el enfermo no requiere hospitalización, expuso, se le envía a su casa con estudios y los insumos necesarios para monitorear su oxigenación, temperatura y presión; se le abre un expediente clínico, se le da seguimiento las 24 horas y, si lo requiere, oxígeno y monitor, y de ser necesario se visita al paciente en su domicilio.
Con este programa, informó Sheinbaum Pardo, quien estuvo acompañada por el director del Instituto Mexicano del Seguro Social, Zoé Robledo Aburto, se prevé atender hasta 500 enfermos con personal médico del sector público y ahora, con el apoyo de las instituciones de salud particulares, entre 600 y hasta 6 mil pacientes.
Lo anterior, dijo, gracias al convenio firmado ente el Insabi y los nosocomios particulares para que personal médico especializado atienda a distancia a personas con Covid-19 con síntomas leves; el costo del servicio será pagado por la dependencia federal.
La mandataria expresó que el propósito es reforzar la atención primaria de la enfermedad y tener una capacidad hospitalaria más amplia.
Se trata de una estrategia similar a la de los módulos de atención respiratoria del Seguro Social (MARSS) que desde el 26 de diciembre pasado aplica el IMSS, de la cual Zoé Robledo informó que se ampliará a ocho puntos más, con los que serán 34 en las inmediaciones de las unidades médicas familiares y hospitales del instituto en la ciudad, y de ser necesario serán más.
En dichos módulos se atiende a personas, sin importar que no sean derechohabientes, con síntomas leves de Covid-19 o que tuvieron contacto directo con un positivo, a quienes se les hace una valoración respiratoria y, en su caso, se les aplica una prueba rápida de Covid-19.
De resultar positivo, se determina si el enfermo requiere ser hospitalizado o puede llevar una atención ambulatoria en casa; de ser la segunda opción, se le entrega un kit con medicamentos, oxímetro y 10 cubrebocas (KN95).
Robledo Aburto señaló que, a la fecha, en los MARSS se han aplicado 19 mil 394 pruebas rápidas, de las cuales 8 mil 131 han dado positivo.
La ubicación de los módulos se puede consultar en la página web www.imss.gob.mx/marss, así como en el teléfono 800 2222 668 o al 55 5658 1111 de Locatel.