Mexicali, BC. En Tijuana urge una solución al tratamiento de basura a largo plazo e instrumentar de manera inicial programas de separación en las casas, además de invertir en centros de separación, reciclaje y aprovechamiento de residuos sólidos en la ciudad, sostuvo el representante de la asociación CIBRUC en Baja California, Cristian Omar Armas.

En la actualidad hay un sobrecosto de 350 millones de pesos en recolección de basura y se entierran 150 millones de pesos de productos sensibles al reciclaje.

Advirtió que el gobierno municipal está obligado a aplicar sanciones a la empresa concesionaria de la recolección de basura que opera el relleno sanitario del Valle de Las Palmas por incumplir el contrato y la Norma Oficial 083-Semarnat.

En el contrato inicial de servicio la empresa promete una planta de separación y una trituradora de llantas, que mientras que en su ampliación se comprometió a instalar una planta de generación de energía pero los equipos se encuentran abandonados en mal estado y sin operar.

Tijuana genera mil 900 toneladas de residuos sólidos urbanos cada día y para un servicio eficiente de recolección se requieren al menos 180 camiones y 60 cajas de transferencia.

Datos de la Dirección de Servicios Públicos Municipales indican que se cuenta con 247 camiones, de los cuales 40 son arrendados y más de 70 están en mal estado, también 33 cajas de transferencia, que una docena son rentadas.

Se estima que la cobertura del servicio actual es de 80 por ciento, debido al mal estado de los equipos, y hay tiraderos clandestinos.

Armas aseguró que la falta de planeación de las anteriores y actuales autoridades municipales provocan que Tijuana tenga un sobrecosto de 350 millones de pesos en la recolección de basura.

En la actualidad, dijo, el ayuntamiento ha movilizado toda la infraestructura del servicio de recolección pero queda a deber en muchas colonias, mientras no se busque la solución a largo plazo y se implementen programas de separación desde casa, que no requieren de mucha inversión, y una vez en marcha el programa se puede invertir en centros de separación, reciclaje y aprovechamiento de residuos.

Acotó que mientras esto no suceda se seguirán enterrando alrededor de 150 millones de pesos de materiales susceptibles de reciclaje y aprovechamiento, obteniendo cada vez más camiones recolectores en mal estado, contaminando nuestro aire por toda la ciudad y seguiremos pagando anualmente 950 millones de pesos por la prestación del servicio.

Agregó que “el problema de los residuos sólidos urbanos no es un problema de camiones, es un problema de voluntad política, el alcalde prometió inversión y proyectos de separación, reciclaje y aprovechamiento de los residuos para generar energía, que aún no llegan”.

Remarcó que la falta de experiencia o falta de voluntad de aplicar la ley por parte de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Ecología, como en la Dirección de Servicios Públicos Municipales, siguen agravando el problema, generando impactos negativos al medio ambiente y al gasto corriente de la ciudad.