Ciudad de México. A pesar de que la Arquidiócesis de México informó que a partir del sábado pasado ya no habría misas con la presencia de personas en sus templos, por el regreso al semáforo epidemiológico rojo en la capital del país, en la Basílica de Guadalupe no sucedió así ya que en la celebración de este mediodía, que habitualmente oficia el cardenal Carlos Aguiar Retes, se permitió la entrada a los fieles.
El área de Comunicación de la Basílica argumentó que este fin de semana ya se tenían programadas misas que no podían cancelarlas, incluida la que presidió el purpurado e indicó que a ésta asistieron un estimado de 350 personas respetando los protocolos sanitarios implementados. Añadió que será a partir de este lunes cuando ya no se permita la participación presencial de fieles en estas celebraciones.
Ayer, la Arquidiócesis de México informó que a partir del 19 de diciembre y hasta el 10 de enero no habrá misas con la presencia de fieles en sus templos; sin embargo, continuarán abiertos y al servicio de las personas “para alentar, con la debida prudencia y según el protocolo establecido, la oración cotidiana que estos tiempos necesitan”.
En tanto, ante esta nueva etapa de confinamiento, en la editorial que publica hoy la Arquidiócesis de México en el semanario Desde la Fe -su órgano de difusión-, llamó a los fieles a recuperar el verdadero sentido de la Navidad, “que no está en el consumismo ni en las reuniones masivas”.
“Esta vez, el confinamiento llega en una de las épocas de más celebraciones, de reuniones y fiestas familiares. Este año, esos anhelados momentos tendrán que esperar, pero no por ello debemos dejar pasar la ocasión. Es momento de aprovechar esta nueva oportunidad para entender el tamaño del desafío que enfrentamos”, indicó.
Pidió recordar que quienes han fallecido “son nuestros muertos, los tuyos y los míos, sin importar si los conocemos o no. Y aprovechemos estos días para que, en familia, y unidos como sociedad, acudamos a la oración”.
Por otra parte, en un artículo que publicó el cardenal Aguiar Retes en Desde la Fe, expuso que “la pandemia es ciertamente una grave crisis; sin embargo, como toda crisis, es una oportunidad para crecer y salir más fortalecidos en nuestras convicciones y en nuestra espiritualidad; para descubrir la fuerza interior que Dios nos ofrece, como don del Espíritu Santo”.