Ciudad de México. La pandemia de Covid-19 puso de manifiesto los elevados niveles de desigualdad que existen entre la humanidad, señaló Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.
Al participar en la II Reunión de los países signatarios del Acuerdo de Escazú, la directora destacó que la crisis sanitaria exacerbó los problemas estructurales del modelo de desarrollo económico de varias naciones.
“La pandemia ha puesto de manifiesto los elevados niveles de desigualdad existentes y que el bienestar humano está intrínsecamente vinculado con la protección del patrimonio natural”, destacó la secretaria ejecutiva de la Cepal.
En este sentido resaltó la importancia del Acuerdo de Escazú, pues es un instrumento que contribuye a dar un paso más a que la igualdad, el crecimiento económico y la protección ambiental caminen juntos dentro de sociedades pacíficas, participativas y justas.
Al respecto, Andrés Napoli, director ejecutivo de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), indicó que no se trata sobre la regulación de los recursos naturales o el territorio de ningún país, sino que busca sentar las bases de una democracia ambiental y de un modelo de desarrollo sustentable e inclusivo para América Latina y del Caribe.