Ciudad de México. Después de dos semanas de negociaciones, finalmente los representantes del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) y el Banco Sabadell anunciaron que habían suspendido el diálogo ante la imposibilidad de llegar a un acuerdo, con lo que se da por hecho que fracasó la fusión que hubiera creado el segundo banco más grande España. La ruptura de las negociaciones se precipitó tras no alcanzar un acuerdo sobre el precio de la acción con la que el BBVA pretendía absorber a la entidad financiera de origen catalán pero que tiene como máximo accionista al magnate mexicano David Martínez.
De haberse producido la fusión, los analistas auguraban la consolidación de un banco de enorme potencial, con más de 950 mil millones de euros en activos, de los cuales 600 mil millones se habrían localizado en España con un tamaño final en nuestro país que habría quedado algo por debajo al que generará la fusión en curso entre CaixaBank y Bankia.
El principal escollo en la negociación fue el precio fijado para el canje de las acciones, una vez que la oferta hecha por el BBVA fue rechazada por los principales accionistas del Banco Sabadell, que la valoraron notablemente insuficiente. La entidad catalana reclamaba un precio de 0,50 euros por título, con lo que se hubiera valorado la empresa en unos dos mil 500 millones de euros, mientras que el BBVA ofreció una cifra sensiblemente inferior.
Otro escollo en las negociaciones fueron las propuestas del BBVA para el consejo de gobierno del futuro banco fusionado, en el que no se contemplaba una presencia notable de los actuales directivos del Sabadell. En cualquier caso, el BBVA, que cuenta con enorme liquidez después de su reciente venta de sus negocios en Estados Unidos, anunció que ya estudia otras alternativas para invertir y hacer crecer su negocio, sobre todo al interior de España.