La Secretaría de Marina (Semar) y la Fiscalía General de la República (FGR) aseguraron 263 kilogramos de cocaína, que eran transportados por vía marítima, en Baja California.
El cargamento fue descubierto gracias a una denuncia anónima, recibida por la Policía Federal Ministerial, quien solicitó a un juez federal una orden de cateo para ingresar a un buque fondeado en el recinto portuario de Ensenada.
Con el apoyo de los elementos de la Marina, los policías ministeriales abordaron así un buque, donde se transportaba una embarcación pequeña, donde se escondían 270 paquetes envueltos en plástico, que contenían un polvo blanco con las características de la cocaína.
La droga y las dos embarcaciones fueron puestas a disposición de la FGR, para que integre la carpeta correspondiente por delitos contra la salud.