Ciudad de México. Miembros de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) cumplieron su segundo día de plantón frente a las oficinas del Gobierno de la Ciudad de México en exigencia de ser atendidos por la titular del Ejecutivo local, Claudia Sheinbaum, para plantear la demanda de mejoramiento a la vivienda y créditos para construcción de casas nuevas en zonas rurales.
Desde la tarde de ayer, el Antiguo Palacio del Ayuntamiento fue blindado por elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) local --quienes se mantienen en los arcos del edificio --con escudos y con extintores--, con lo que se impide el tránsito peatonal; mientras el resguardo de vallas metálicas continúa alrededor del Zócalo y frente al edificio de Gobierno y de la Suprema Corte de Justicia, en la calle José María Pino Suárez al cruce con Venustiano Carranza, con lo que no hay acceso al Palacio Nacional.
El despliegue policiaco de alrededor de 100 elementos en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento se realizó, luego de que los manifestantes plantearon la posibilidad de ingresar por la fuerza al inmueble; sin embargo, no ocurrió ni tampoco hubo enfrentamientos entre los uniformados y los miembros de la UNTA.
Hasta el cierre de la edición, los elementos policiacos mantenían el resguardo del edificio, mientras que los liderazgos de la UNTA aceptaron una mesa de diálogo que se realizaba a puerta cerrada; no obstante, no se reportaron avances del encuentro.
Trascendió que la exigencia de los miembros de la UNTA son créditos por más de 200 mil pesos a fondo perdido, pero sin especificar el número de personas para las que solicitan el apoyo; no obstante, se conoció que esa petición no será aceptada por las autoridades del gobierno capitalino.
Además del campamento de 40 casas de campaña instaladas en el circuito del Zócalo, la UNTA mantiene la toma del edificio del Instituto de Vivienda, en la colonia Granjas, en Iztacalco, así como la instalación de un plantón con carpas en las que permanecen unas 600 personas.
De acuerdo con manifestantes entrevistados en el Zócalo, el plantón no será retirado hasta que “ya no se nos den largas”, pero ayer en sus lonas y pancartas exigieron la destitución del funcionario del Invi, Rodrigo Chávez, a quien acusaron de privilegiar a otras organizaciones.
Mientras que los miembros del Frente Anti- AMLO que se mantienen en la plancha definirán el sábado si se retiran o si permanecerán hasta después del 1 de Diciembre, con el objetivo de no dejar la plaza libre para el informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.