En medio de la discusión que se da en el Senado sobre la regulación del uso de la mariguana, el ex candidato presidencial del PAN, Ricardo Anaya, pidió que se ponga a la persona en el centro del debate.
¿Por qué no mejor invertir la mayor parte de los recursos en educación, en prevención y en centros de rehabilitación, con un enfoque de salud pública?, preguntó en un video difundido esta mañana.
Tras la orden de Suprema Corte de Justicia de regular el uso de esta droga, señaló que la discusión es sobre cómo acatar la resolución.
Recordó que en México ya no está penado poseer cantidades pequeñas de mariguana para consumo personal, pero no está regulado cómo adquirirla legalmente, lo cual es un absurdo que provoca enormes riesgos para las personas y se presta a incontables abusos por parte de la autoridad.
Abrir la puerta al capital privado puede ser muy peligroso y no se puede dejar este tema tan delicado en manos de los legisladores de Morena. “Nos tenemos que involucrar en la discusión”, puntualizó Anaya Cortés.
El también ex dirigente del PAN señaló que en México, la guerra contra las drogas no ha producido los resultados deseados, y la regulación parece la alternativa más viable; pero al diseñar la política pública debe tenerse en cuenta que no se trata de sustancias inofensivas, incluyendo la mariguana.
El hecho de que uno de los compuestos de la planta tenga aplicaciones curativas, pues no significa que el consumo de la planta entera sea saludable. El reto de la regulación debe asumirse con seriedad y con enorme responsabilidad.
Recordó que el abuso de los enervantes causa muchos problemas y que el problema tiene dos lados, el de la producción y venta, es decir, la oferta, y el del consumo, la demanda.
“Hasta ahora, siguiendo los dictados de Estados Unidos, especialmente desde que el presidente Nixon declaró la guerra contra las drogas, la mayoría de los gobiernos del mundo gasta el 90 por ciento del dinero destinado a la política de drogas, tratando de resolver el problema del lado de la oferta. Y eso claramente no ha funcionado”.
¿Por qué no poner a la persona en el centro?
Por qué no mejor invertir la mayor parte de los recursos en educación, en prevención y en centros de rehabilitación, con un enfoque de salud pública, cuestionó el panista.