Río de Janeiro. El Ministerio Público de Río de Janeiro denunció al senador brasileño Flavio Bolsonaro, hijo del presidente Jair Bolsonaro, y a otras 16 personas por un presunto esquema de lavado de dinero en el gabinete de Flavio cuando se desempeñaba como diputado estatal entre 2007 y 2018.
La denuncia fue formalizada el 19 de octubre pero recién se hizo pública este miércoles cuando todos los ojos estaban puestos en el escrutinio de la votación presidencial de Estados Unidos.
Según una nota publicada en el sitio web del Ministerio Público, los fiscales de Río alegan que Flavio habría participado de un supuesto esquema de desvío de dinero público mediante el cual empleados “fantasma” le devolvían parte de su salario como funcionarios públicos de la Asamblea Legislativa de Río.
La fiscalía estatal no dio más detalles sobre el contenido de la denuncia, que se mantiene bajo secreto de sumario.
Bolsonaro negó haber cometido cualquier delito y se mostró confiado en que el tribunal no aceptará la denuncia en un mensaje compartido en su cuenta de Instagram. La acusación es “inviable porque está desprovista de cualquier indicio de prueba. No pasa de una crónica macabra y mal engendrada”, dijo Rodrigo Roca, uno de los cuatro abogados de Flavio en una nota.
Jair Bolsonaro fue elegido presidente en 2018 con la promesa de barrer la corrupción y la delincuencia. Pero el cerco judicial que se estrecha sobre sus hijos y la denuncia del ex ministro de Justicia Sergio Moro, quien dejó el gobierno en abril alegando que Bolsonaro quería intervenir la Policía Federal, han generado dudas sobre el compromiso del presidente. Además de Flavio, el Ministerio Público denunció a Fabricio Queiroz, ex chofer del hijo del presidente, que fue arrestado en junio por la misma investigación.