Ciudad de México. El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) indicó que, como era de esperarse, la economía mexicana muestra una reactivación luego de ser afectada por la pandemia de Covid-19; sin embargo, advirtió, la recuperación está perdiendo fuerza.
En un reporte, el organismo explicó que la reapertura de la actividad económica dio impulso al país, pero este se ha debilitado por el contraste que existe entre la recuperación de la actividad industrial y la de los servicios.
El IMEF recalcó que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) creció 1.1 por ciento durante agosto pasado respecto a julio, luego de que en junio creciera 8.9 por ciento y en julio lo hiciera 5.7 por ciento.
En tanto, el el componente industrial del IGAE creció 3.3 por ciento en agosto, mientras que el de servicios lo hizo en sólo 0.4 por ciento, cuando sus valores en junio y julio fueron de 18.1 y 7.1 por ciento en el primer caso y 6.0 y 4.7 por ciento en el segundo, respectivamente.
“Estos datos en la actividad económica del país muestran una clara desaceleración”, advirtió el organismo privado.
En el estudio el IMEF explicó que las manufacturas, que representan más de la mitad de la producción industrial, han sido una de las ramas de actividad económica que más rápidamente se ha recuperado, lo que se explica por su vocación exportadora y la pronta recuperación de la economía estadunidense.
En contraste, los servicios dependen en mayor medida de la demanda interna, especialmente del consumo privado de los hogares y de la inversión de las empresas; que se han visto fuertemente afectados tanto por el impacto asociado al confinamiento como por el deterioro en el entorno de negocios producido por una combinación de factores adversos.
Los elementos negativos, dijo el organismo, van desde el incremento en la inseguridad hasta la incertidumbre que han generado decisiones de política pública controversiales.
Asimismo, indicó que la incertidumbre sobre la velocidad y fuerza de la recuperación sigue siendo elevada y la posibilidad de que las autoridades se vean en la necesidad de recurrir a nuevas medidas de confinamiento es uno de los riesgos más importantes, como está sucediendo en varias partes del mundo ante la expansión acelerada del contagio.