Aunque la sede de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) ubicada en el Centro Histórico de la capital forma parte de los monumentos registrados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), dicho organismo no puede incidir en el tema de la ocupación del edificio por parte de grupos feministas.
Así lo indicaron fuentes del INAH, las cuales señalaron que este tema y el del eventual cambio de posesión legal del inmueble le corresponden únicamente a la CNDH, organismo que todavía tiene la titularidad del edificio, a pesar de que éste se encuentra tomado por el llamado Bloque Negro desde inicios de septiembre.
De acuerdo con documentos oficiales del INAH, el inmueble ubicado en el número 60 de la calle de República de Cuba forma parte del Catálogo Nacional de Monumentos Históricos Inmuebles ubicados en el “perímetro A” del Centro de la Ciudad de México.
En dicho registro, se consigna que el inmueble también incluye el número 62 de la misma calle -ubicado entre Allende y República de Uruguay-, está habilitado para uso de oficinas y data del siglo XIX.
Las fuentes consultadas explicaron que, aunque el edificio forme parte del mencionado catálogo de monumentos históricos, el INAH no tiene incidencia en el destino final del sitio, pues la posesión legal del mismo sigue siendo de la CNDH. El único nivel de participación que puede tener el instituto, afirmaron, es cuando se deba realizar alguna obra de remozamiento.
La semana pasada, la activista Erika Martínez, una de las ocupantes del edificio, señaló que aunque la CNDH ofreció cederle a los grupos feministas un inmueble distinto para que realizaran su labor de apoyo a mujeres violentadas, dichos colectivos se negaron, por considerar que República de Cuba 60 “ya es un monumento vivo” para la lucha que ellos realizan.