El arresto en Acapulco de uno de los dirigentes históricos de la guerrilla de Guatemala, César Macías, mejor conocido como César Montes, y la entrega por parte de autoridades mexicanas a militares de aquel país en la frontera común de El Carmen-Talismán, fueron señalados de procesos ilegales y una detención arbitraria por parte de una justicia y un gobierno inmoral, por diversas organizaciones, entre ellas el Comité Ejecutivo Nacional de Morena, el Partido Guatemalteco del Trabajo y la Liga Revolucionaria de Artistas de la Cultura.

Montes abandonó Guatemala y se instaló en Guerrero, donde residía su familia, después de que la Fiscalía de Delitos de Narcoactividad del país vecino emitió tres órdenes de aprehensión en su contra con cargos de homicidio, que él niega.

El pasado 9 de octubre, en un operativo coordinado entre el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Guardia Nacional, en el que participaron varios marinos, Montes fue detenido. Al día siguiente fue trasladado vía aérea a Tapachula y de ahí a la frontera, donde fue entregado sin un proceso de extradición previo a las autoridades judiciales de su país.

El 11 de octubre, ya interno en una penitenciaría en la Ciudad de Guatemala, el ex guerrillero de 77 años empezó a escribir una especie de diario que llamó Cartas desde la prisión, donde refiere que el día de su aprehensión presentó a las autoridades del INM documentos que demuestran que inició un proceso de petición de refugio ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar). Su resolución estaba pendiente. También propuso a las autoridades mexicanas que en lugar de ser entregado al gobierno de su país fuera enviado a Nicaragua.

Su traslado a Guatemala, asegura, equivale a una sentencia de muerte.

Diversas organizaciones patronales guatemaltecas, que en el pasado apoyaron a los gobiernos militares, por su parte felicitaron al gobierno de Alejandro Giammattei por la captura del veterano combatiente, a quien acusan de ordenar invasiones, destrucción de la propiedad privada y desafío a la autoridad.

Uso mediático al caso

El Comité de Derechos Humanos en Guatemala, con sede en Estados Unidos, advirtió que aunque varios grupos defensores de las garantías individuales acusan a Montes de operar para favorecer a empresas mineras y megaproyectos de grandes propietarios y firmas extranjeras, el arresto también ha sido utilizado mediáticamente para desacreditar las luchas de organizaciones campesinas e indígenas.

Montes se levantó en armas desde los años sesenta, al lado de Luis Turcios Lima. En una segunda etapa de esa lucha fue fundador de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, una de las cinco organizaciones que conformaron la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca. También combatió en el frente Guazapa de El Salvador, en las filas del Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional y antes en la ofensiva antisomocista del Frente Sandinista de Liberación Nacional de Nicaragua.

Después de la firma de los acuerdos de paz en la región fue instructor de ex combatientes en El Salvador.

En su país se integró a la política, primero como cofundador del Partido Encuentro por Guatemala, que llevó como candidata a la presidencia a la defensora Nineth Montenegro y, después, en 2007, a la líder indígena Rigoberta Menchú, cuando perdió su registro.

En 2003 fue asesor del Fondo de Tierras, dependiente del Ministerio de Agricultura, durante el gobierno de Óscar Berger, apoyando en la gestión de regularización de predios en el periodo de la posguerra.

En 2007 participó como fundador de la Fundación Turcios Lima, en la Fundación de Fomento de Recursos Naturales de la Cuenca de Polochic, creada con el fin de desarrollar proyectos para mitigar la pobreza en la zona entre los departamentos de Izabal y Alta Verapaz, en el oriente guatemalteco, una zona de alto valor estratégico por sus yacimientos de níquel y la explotación de biocombustibles.

En esta última fundación participan la minera CGN, subsidiaria de la canadiense Skye Resources; Mayaníquel SA, subsidiaria de la trasnacional australiana BHP Billiton, y varias agroindustrias locales que explotan madera, palma africana, azúcar y hule. Aunque la finalidad de ese organismo es gestionar la solución por los numerosos conflictos de tierras y despojos que hay en la cuenca, en los años recientes varios diferendos desembocaron en una mayor conflictividad, despojos por parte de las empresas, enfrentamientos y detenciones arbitrarias.

En agosto de 2019 uno de estos conflictos se desbordó y en un enfrentamiento armado murieron tres soldados en la finca Samuy II, en Izamal. El gobierno anterior de Jimmy Morales decretó un estado de sitio en seis despartamentos colindantes a la cuenca. Las organizaciones patronales y el gobierno acusaron a César Montes de haber ordenado la emboscada de los militares. De este hecho se derivó la orden de aprehensión que ejecutaron la Interpol Guatemala e Interpol México.

En sus Cartas desde la prisión, el veterano combatiente asegura que ha vuelto a ser un guerrillero mochila al hombro, que escribe su próximo libro, que se dedica a hacer conciencia entre carceleros e internos y que la reclusión no es sino una nueva experiencia en mi vida revolucionaria.