Ciudad Acuña, Coah. Aunque es posible que en la actualidad haya más casos de contagios de Covid-19, estamos salvando más vidas, los médicos y enfermeras están salvando más vidas; aunque pueda haber más infectados, no se reflejan necesariamente en el número de fallecidos, aseveró el presidente Andrés Manuel López Obrador, para quien en esta coyuntura de la pandemia ya pasó lo peor y se evitó la saturación de hospitales.

Al clausurar la 111 asamblea ordinaria del Instituto Mexicano del Seguro Social, López Obrador admitió que en Europa hay un rebrote, pero ya no con los mismos efectos en cuanto a fallecimientos.

Sobre la crisis económica, afirmó que ya se ve la luz al final del túnel, pues con los 164 mil empleos que hasta ayer se habían recuperado en octubre, son ya 400 mil plazas formales generadas desde agosto, ratificando su augurio de que para marzo se recuperará el millón de empleos perdidos.

El director del IMSS, Zoé Robledo, consideró que por la coyuntura esta vez el informe no se centraría en el balance financiero del organismo, sino en el proceso de reconversión para hacer frente a la pandemia, ante la cual las instituciones hemos tenido la oportunidad de ser la mejor versión de nosotros mismos. La pandemia no ha terminado, pero hoy estoy seguro que estamos mejor preparados para hacer frente a lo que venga.

En su intervención hizo un apretado resumen de la reconversión del IMSS para enfrentar la epidemia de Covid-19, pues esta pandemia, más que una crisis sanitaria, es un reto civilizatorio para esta generación y las que vienen. Esta reconversión significó hacer frente al déficit estructural hospitalario y de personal médico, lo que implicó adecuar la operación para adaptarlo a la emergencia sanitaria.

La asamblea se realizó en el Hospital General de Zona 92 del IMSS que se inauguró hoy, lo que dio pie al Presidente para destacar el déficit de infraestructura hospitalaria en la zona fronteriza, pues a pesar de tener muchos trabajadores serios, no hay suficientes unidades.

Robledo dijo que la epidemia se presentó cuando ya se había determinado en el IMSS abandonar la visión financierista y enfocarse en su misión de prestador de servicios. Desde entonces se advertía el déficit de camas y consultorios, al tiempo que se había diagnosticado la cantidad de obras inconclusas. De las 56 identificadas, hay 33 ya operando y 13 están en proceso.

Cuando la pandemia podía convertirse en una crisis social, por instrucción presidencial se establecieron medidas para la atención de la población más vulnerable con acciones para romper cadenas de contagio. Surgieron las incapacidades a distancia, de las cuales se han expedido a 90 mil asegurados y las recetas resurtibles que suman ya 12.9 millones.

El funcionario aseveró que se adoptaron acciones para evitar que ninguna persona que requiriera atención hospitalaria por Covid-19 se quedara sin ser atendida, para lo cual se necesitaba ampliar a 16 mil camas, casi la mitad de la capacidad instalada. Se expandió el IMSS con unidades nuevas pero que estaban detenidas en su inauguración, como el hospital que hoy se inauguró.

Reconoció que en un momento dado se presentó el altísimo riesgo de que en la pandemia hubiera un episodio vergonzoso para el IMSS, que hubiéramos cerrado las puertas a los no derechohabientes. Por acuerdo del consejo técnico se acordó atenderlos, por lo que a la fecha se ha recibido a 32 mil 190 personas.