Ciudad de México. Evo Morales Ayma, quien el año pasado se viera obligado a renunciar a la presidencia de Bolivia ante un golpe de Estado, agradeció al gobierno de México el apoyo y protección que recibió ante los riesgos contra su integridad y la de muchos de sus colaboradores.
Quiero agradecer al presidente @lopezobrador_, al canciller @m_ebrard, al vicecanciller @maximilianoreyz y al pueblo mexicano por todo lo que hicieron por nosotros. Nuestros pueblos son hermanos y tienen un destino común. ¡Muchas gracias! https://t.co/VJ6E8T3CPP
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) October 22, 2020
Este jueves, el ex mandatario boliviano subió un mensaje en su cuenta de Twitter en el que agradece al pueblo de México, al presidente Andrés Manuel López Obrador, al canciller Marcelo Ebrard Casaubón y al subsecretario para América Latina y el Caribe de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Maximiliano Reyes Zúñiga, “todo lo que hicieron por nosotros”.
El líder boliviano tuiteó: “Quiero agradecer al presidente @lopezobrador_, al canciller @m_ebrard, al vicecanciller @maximilianoreyz y al pueblo mexicano por todo lo que hicieron por nosotros. Nuestros pueblos son hermanos y tienen un destino común. ¡Muchas gracias!”.
El domingo pasado, en las elecciones presidenciales, Luis Arce, candidato del Movimiento al Socialismo (MAS), del que Evo Morales es la figura más representativa, ganó con una contundente diferencia de votos en su favor.
Esto se da, justo un año después de las elecciones de 2019, donde Morales Ayma obtuvo el triunfo para un cuarto mandato en la presidencia. Sin embargo, diversos sectores de aquel país, con el apoyo de instancias como la secretaría general de la Organización de Estados Americanos, acusaron de un presunto fraude, lo que originó movilizaciones sociales e inestabilidad en Bolivia, que concluyó con un golpe de Estado y la dimisión de Morales a fin de evitar que la crisis se agudizara.
Ante los riesgos por su seguridad, el noviembre pasado el gobierno de México otorgó asilo político a Evo Morales y varios de sus colaboradores y simpatizantes del MAS, lo que generó conflictos con el gobierno de facto de Jeanine Áñez.