Ciudad de México. Los cambios en el orden internacional comienzan a generar diversas tensiones que podrían poner en riesgo la cooperación multilateral, aseveró el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard Casaubón.
Al participar este domingo a través de un video mensaje en la quinta edición del "Encuentro Libertad por el Saber. ¿Cuál desarrollo para un planeta saludable?", organizado por el Colegio Nacional, el canciller destacó la importancia de la cooperación multilateral, la cual será determinante para resolver las problemáticas globales generadas a causa del Covid-19.
Las tensiones entre China y Estados Unidos, en particular económicas y tecnológicas; el fortalecimiento de ideologías políticas que favorecen nacionalismos extremos o postulados religiosos; y discursos antagónicos a la cooperación multilateral, que se presentan incluso desde democracias consolidadas como Estados Unidos y Gran Bretaña, son algunas de las tensiones que el nuevo orden mundial tendrá que enfrentar.
Frente a ello, aseveró que México antepondrá la cooperación a través de los órganos multilaterales surgidos tras la segunda guerra mundial.
“La pandemia ha costado muchas vidas, nos ha puesto en situación difícil y en crisis económica; pero también ha traído consigo una actualización imperativa de la cooperación, sin ésta no hay ninguna solución posible. No hay ninguna posición política viable que plantee la no cooperación de lo que hace al Covid-19, lo que vemos es lo contrario, la cooperación ya no como un ideal, sino como una solución posible a corto plazo”.
Indicó que la participación que México tendrá ante el Consejo de Seguridad de la ONU, del que formará parte el próximo año, se basará en dos posiciones: involucrarse en muchos conflictos globales de difícil solución, “que pueden generar tensión con nuestro socio principal que es Estados Unidos, porque no necesariamente coincidiremos ni tenemos los mismos intereses”; y facilitar que las tensiones mundiales se reduzcan y se fortalezca el orden multilateral.
Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), consideró que en los próximos dos o tres años los gobiernos de la región, entre ellos México, “no podemos hablar de austeridad” ante la crisis financiera y económica a causa de la pandemia, por lo que hará que aplicar instrumentos convencionales y no convencionales, y ene se marco “la solidaridad internacional es fundamental”.
Alertó que la región tendrá una “década perdida” pues el PIB per cápita de este año será igual al de 2010; además habrá 2.7 millones de empresas formales que cerrarán, un desempleo de 44 millones de personas, 231 millones de habitantes en pobreza y 96 millones en pobreza extrema, lo que representará un retroceso de 15 años en el primer caso y de 30 en lo referente a la miseria extrema.
Ante esta situación, planteó, los países deben aplicar políticas fiscales y monetarias expansivas, como extender el ingreso básico de emergencia por 12 meses a la población en pobreza, lo que implica dar a 230 millones de personas 150 dólares al mes; ampliar los plazos y periodos de gracia en el pago de impuestos para pequeñas, medianas y microempresas; e invertir uno por ciento para garantizar la inclusión digital universal.