Antonio Rocha Santos, responsable del cuerpo académico Sistemas Jurídicos Contemporáneos y Derechos Humanos del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la UdeG, dijo que se tomó la decisión de sumar esfuerzos y realizar las investigaciones necesarias en torno de la contaminación del agua que llega a los hogares, ante la evidencia encontrada hasta ahora.
Consideramos que es necesario realizar estudios más completos para determinar si hay relación entre las sustancias contenidas en el agua que llega a los domicilios con enfermedades gastrointestinales, dermatológicas y hepáticas, así como las soluciones que debe haber y si hay la necesidad de realizar obras civiles
, expuso.
Alicia Torres Rodríguez, responsable del cuerpo académico Agua, Medio Ambiente y Sustentabilidad, también del CUCSH, afirmó que es evidente que los organismos operadores del agua en Jalisco, en particular el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (Siapa) que surte al área metropolitana, no tiene la capacidad para dar el tratamiento necesario y garantizar la potabilidad del líquido.
El investigador del Centro de Estudios Estratégicos para el Desarrollo del CUCSH, José Antonio Gómez Reyna, informó que el agua que llega a las casas de Guadalajara y municipios conurbados proviene, en 60 por ciento, del Lago de Chapala y el resto de la presa Elías Chávez, y de pozos, lo que significa que el agua tiene diferentes condiciones.
La mala calidad del agua que se recibe en Guadalajara tiene al menos tres meses de haberse evidenciado, por lo turbio del líquido y luego que vecinos de varias colonias realizaron estudios con laboratorios particulares en los que se descubrió la presencia de heces fecales.
Gómez Reyna dijo que según la norma el agua no debe ser turbia, debe carecer de olor y no transportar bacterias, pero es notorio que mucha del agua que se usa en la ciudad no es potable ni de calidad y constituye un riesgo para la salud, por lo que difiero de las opiniones de algunos funcionarios del estado que indican que no hay problema para consumirla, cuando esto no es así
.
Sugieren expertos un estudio más profundo
Alertó que la importancia de un estudio a profundidad radica en que también hay nuevos contaminantes como hormonas, nanomateriales y antibióticos en un agua que la población utiliza para lavar sus trastes, sus frutas y verduras, para bañarse y lavarse los dientes.
Criticó que se inyecte cloro en las tuberías como medida de combate a lo contaminado de las aguas, pues el proceso de desinfección con dicho elemento debe durar un tiempo dentro de los tanques antes de enviarlo por las tuberías, sin contar que un alto nivel de cloro además puede ser tóxico.
La tarde del jueves, asociaciones ambientalistas se manifestaron para exigir al gobernador Enrique Alfaro que garantice que haya agua potable no sólo la que se suministra a las casas, sino la que es regresada sin tratamiento a lagos y ríos.