Ciudad de México. El presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró hoy que se mantuvo “al margen” de las decisiones del Instituto Nacional Electoral (INE) y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación respecto al proceso para dar o no registro a nuevos partidos políticos.

Un día después de la decisión del Tribunal que negó el registro al partido vinculado al ex presidente Felipe Calderón, el mandatario se reservó su opinión al argumentar que “son procesos que llevó a cabo el INE y en este caso el tribunal”.

En la conferencia de prensa, luego de solicitarle su opinión, preguntó a los reporteros: ¿Cuáles son los partidos que recibieron registro? ¿Cuál es ese?

-De Pedro Haces, le respondieron.

-¿Y el otro?, volvió a preguntar.

-Redes sociales.

-No opino, insistió.

“Esa es una decisión del INE. Quiero dejar de manifiesto que nosotros nos mantuvimos al margen, que es parte también de los cambios”.

Antes, añadió, los presidentes decidían a quién darle un registro, a quién no, una candidatura. Eso pasó al basurero de la historia.

Sin mensajeros ni halcones

Enseguida dijo a los servidores públicos que él no tiene mensajeros ni halcones para mandar mensajes, de ahí que desacredita que usen su nombre.

“Y esto lo digo también en lo general porque de repente para programas de vivienda o para cualquier acción se utiliza mi nombre, es decir, ‘ya lo acordamos, ya lo vimos con el presidente’ enseñan hasta fotos, yo me tomo fotos con muchos”.

Entonces, señaló el presidente, no crean nada, sobre todo si les piden dinero, ni familiares, ni amigos ni compañeras, compañeros de lucha, nada.

Por eso, si hay algo, aquí (en Palacio Nacional) se informa y si hay dudas, lo único que tienen que hacer es ‘espéranos tantito’ y mandar preguntar para que no se use mi nombre.

Dijo que es seguro que en nombre de otros presidentes también se cometieron fechorías .

Cuando el Estado Mayor existía, recordó, en un viaje se gastaron millones de pesos, “creo que 7 millones nada más de servicios de internet para ir a Colombia o Argentina. Siete millones una factura, claro, falsa. No creo que el Presidente Peña supiera de eso; esto lo hacían los que manejaban estas partidas que, por cierto, eran como partidas secretas. Por eso, mucho ojo”, expresó.