Ciudad de México. El Senado rindió homenaje al ilustre mexicano, doctor Mario Molina Pasquel y Enríquez, guardó un minuto de silencio y los coordinadores parlamentarios montaron una guardia de honor en el pleno.
El presidente de la Cámara Alta, Eduardo Ramírez destacó Molina fue un mexicano ejemplar, ingeniero químico egresado de “nuestra Máxima Casa de estudios”. Él, junto con Alonso García Robles y Octavio Paz forman la triada de ”nuestros premios Nobel”.
Ramírez, en su discurso a nombre del Senado, resaltó “por ocho años fue uno de los 21 científicos que formaron parte del Consejo de Asesores de Ciencia y Tecnología del presidente Barack Obama, prevkiamente lo había sjido del presidente Bill Clinton”.
En México, acusó el morenista, “a pesar de sus esfuerzos por llamar la atención en trascendentes temas no se le dio el reconocimiento a la altura que merecía”.
Molina, subrayó Ramírez, recibió innumerables galardones, 40 doctorados Honoris Causa, y fue el primer mexicano en recibir la Medalla Presidencial de la Libertad en Estados Unidos.
Sus investigaciones, refirió el morenista, llevaron a la conclusión de que es el hombre quien provoca el adelgazamiento de la capa de ozono, que “nos lleva al calentamiento global. Gracias a sus investigaciones ahora se evita el uso de gases CFC-11 en cientos de productos como aerosoles, solventes o aires acondicionados.
Mario Molina enfrentaba el cambio climático con una visión optimista desde una perspectiva en donde la ciencia es la forma más efectiva de prevenir y evitar catástrofes derivadas del calentamiento global, apuntó Ramírez.
Sus recomendaciones eran cuidadosos, a México le decía que “no puede reducir el uso de combustibles fósiles drásticamente porque el resto del planeta no lo ha hecho y no puede perder competitividad así, pero lo que México si puede hacer es es promover eficiencia energética”.
Lo que él quería en sus últimos días, dijo Ramírez, en un planta que trato de salvar “era que reconociéramos, que tomáramos conciencia de lo que estamos estropeando, no podemos dejarle a futuras generaciones un planeta en el que no puedan vivir”.
Después del discurso, se montó una guardia de honor en su memoria.
También el pleno guardó un minuto de silencio en memoria del ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y ex secretario de Salud, Guillermo Soberón .