Por dos años consecutivos lo generado por la actividad económica en México no compensará el crecimiento de la población. El Fondo Monetario Internacional (FMI) estima que el producto interno bruto (PIB) per cápita caerá 9.9 por ciento en 2020, de la mano de una reducción de 9 por ciento estimada en la actividad económica.
Previo a que los brotes de la Covid-19 en China devinieran en una crisis económica mundial, el año pasado el PIB per cápita en México se redujo 1.4 por ciento, cuando la actividad económica lo hizo en 0.3 por ciento sin una recesión simultánea en varios países como la actual.
La semana pasada, el FMI informó que ante la mejora en las manufacturas actualizó la perspectiva de crecimiento para México en 2020, estima que la economía se contraiga 9 por ciento, por debajo del 10.5 publicado en junio pasado.
Para 2021 aumentó la previsión de un previo 3.3 por ciento a 3.5 por ciento. Con ello, en las Perspectivas de la Economía Mundial se prevé que luego de dos años de contracción, la generación de riqueza por habitante –medida por el PIB per cápita- en México crezca 2.5 por ciento.
La economía mundial se está recuperando de la pandemia de #COVID19, pero el largo camino de vuelta al crecimiento es desigual e incierto.
— FMI (@FMInoticias) October 13, 2020
Vea los detalles en la última edición de perspectivas de la economía mundial #WEO https://t.co/yVyF19g90X pic.twitter.com/IMXh1jW6yJ
En el mismo documento se estima que la inflación en 2020 cierre en 3.4 por ciento y el próximo año lo haga en 3.3 por ciento. Si bien ambas proyecciones se encuentran en el rango objetivo del Banco de México, que es de 3 por ciento +/- 1 punto porcentual, será hasta 2025 que baje a 3 por ciento.
Sobre el mercado laboral en el país, el FMI calcula que el desempleo aumentará a una tasa de 5.2 por ciento este año y a 5.8 por ciento el próximo.
Durante la presentación del informe, Gita Gopinath, directora del Departamento de Estudios del organismo, explicó que en el mundo el empleo sigue “muy por debajo de los niveles prepandémicos” y tiene como principales afectados a los que ya estaban en peor condición: los trabajadores de bajos ingresos, los jóvenes y las mujeres. Según los estimados del FMI se espera que 90 millones de personas caigan en pobreza extrema este año.
Además, proyecta que la contracción mundial sea de 4.4 por ciento en 2020, una revisión 0.8 por ciento más que lo reportado en junio. China como el único contrapeso con un tasa de crecimiento proyectada en 1.9 por ciento este año. En 2021, se estima que el crecimiento repunte al 5.2 por ciento, 0.2 por ciento por debajo de lo estimado en junio.
Aunque la economía mundial se está reanimando, la recuperación probablemente será larga, desigual e incierta; algunas economías comienzan a recuperarse más rápido de lo previsto, y las perspectivas de otras han desmejorado. #WEO
— FMI (@FMInoticias) October 13, 2020
Proyecciones por región: https://t.co/KMIB504ZcT pic.twitter.com/xxo01mSgSK
En conferencia de prensa, Gopinath expuso que así como han mejorada las perspectivas de Estados Unidos (ahora se prevé que se contraiga 4.3 por ciento este año, lejos del 8 por ciento estimado en junio) dados los paquetes de ayuda y una menor reducción de la movilidad, hay regiones como América Latina donde ya se da por descontado que niveles previos a la pandemia se vean antes de 2023.
El organismo calcula que en suma América Latina se contraiga 8.1 por ciento este año y en 2021 el repunte sea de 3.6 por ciento. Ambas proyecciones mejores a las de México.
A nivel mundial, hasta 2025 seguirán arrastrándose los efectos de la pandemia. El FMI calcula que en esos cinco años la pérdida en la producción respecto a lo que se estimaba antes de la crisis será de 28 billones de dólares. “Esto representa un grave revés para la mejora del nivel de vida promedio en todos los bloques de países”, añadió la economista del FMI.
Matizó, si se acelera una respuesta médica los ingresos globales podría aumentar en casi 9 billones de dólares para fines de 2025. Esto en un marco donde especialistas consultados por el FMI prevén que la transmisión local de la Covid no se reducirá sino hasta finales de 2022, pese a que haya vacunas, agregó en conferencia.
Por lo pronto, en el rubro laboral se deben promover políticas para facilitar “la reorientación” de trabajadores que hasta ahora se ocupaba en sectores que probablemente se contraerán a largo plazo –como los viajes- a otras actividades como el comercio electrónico; y también la inversión pública en infraestructura verde puede aumentar los empleos, expuso.
Abundó que los países emergentes y en desarrollo necesitarán apoyo en forma de donaciones internacionales, financiamiento en condiciones favorables y alivio de la deuda en algunos casos. Gopinath advirtió que en donde el endeudamiento sea insostenible, requiere reestructurarse lo antes posible para liberar las finanzas.
Subrayó también la necesidad de un nuevo marco fiscal en el mediano plazo que aumente la progresividad de los impuestos y haga que las empresas paguen lo justo, ya que el gasto fiscal para limitar la pandemia y el colapso del producto han llevado los niveles de deuda pública global a un récord del 100 por ciento del PIB.
Los efectos de Covid-19 podrían contraer todas las economías de la Unión Europea, con un impacto más agudo en las naciones del sur que dependen del turismo. Vía Graphic News
La economía global está saliendo del abismo causado por la pandemia de Covid-19. El pronóstico global de crecimiento sube a 5.2 por ciento para 2021, según el Fondo Monetario Internacional. Vía Graphic News