Al comparecer para la glosa del segundo Informe presidencial, Herrera respondió a los reiterados cuestionamientos de la oposición sobre el establecimiento del ingreso básico universal, y dejó claro que se requieren 1.9 billones de pesos anuales para ponerlo en marcha, cantidad que es superior al total de las participaciones federales y todos los fondos que reciben las entidades federativas; representaría más de 8 por ciento del producto interno bruto (PIB).
Es una discusión, dijo, que se ha venido posponiendo, incluso en las economías avanzadas, porque se piensa que si hubiera recursos como éstos, en realidad a lo que hay que llevarlos es a la inversión, a la educación
, y permitir que se inserten en el mercado laboral los trabajadores”.
Rechazó las críticas de PAN, PRI y PRD de que el presupuesto para 2021 sea centralista, y resaltó que se destinará a estados y municipios más de 50 por ciento de la recaudación federal participable.
Insistió en que el gobierno de la República ha hecho grandes esfuerzos para asegurar que el impacto de la pandemia del Covid-19 en las finanzas de los estados sea el menor posible. Precisó que hasta ayer se habían transferido 47 mil millones de pesos, y este miércoles entrarán a las arcas otros 7 mil 800 millones de pesos adicionales del Fondo de Estabilización de las Entidades Federativas.
El titular de Hacienda no pasó por alto la intervención, particularmente agresiva, del panista Gustavo Madero, quien se refirió al presidente López Obrador con insultos y sostuvo que no es la pandemia la que ha llevado al país a la debacle económica, sino ocurrencias, como la cancelación del aeropuerto en Texcoco, y decisiones estúpidas
del Ejecutivo federal.
Herrera reviró: tienen que haber sido muy malas esas ocurrencias, porque se está cayendo la actividad económica en 170 países, no nada más en México. Debe haber 169 naciones que estaban fijándose en qué hacíamos en el nuevo aeropuerto internacional
.
Desde su intervención inicial resaltó que el gasto destinado a la atención de la pandemia es una prioridad para el gobierno, por lo que no se han escatimado recursos y se han orientado al sector salud 50 mil millones de pesos.
“Tenemos que enfocarnos en mitigar los efectos en la población, tanto en materia de salud como económica, explicó e hizo notar que probablemente lo más importante es entender que por un tiempo más tendremos que convivir con el Covid-19
y adaptar a ello tanto las actividades económicas como las sociales y educativas.
Sobre el panorama económico dijo que se registró una contracción anual de 18.7 por ciento del PIB en el segundo trimestre de 2020. Se enfrenta el reto más desafiante en materia de política sanitaria y económica de los últimos 100 años
.
Sin embargo, resaltó que en condiciones difíciles como las actuales, la recaudación ha permitido que el Estado cuente con los recursos suficientes para atender los temas más urgentes.