Ciudad de México. La inversión fija bruta y el consumo, dos indicadores que reflejan el estado de la demanda interna de la economía, crecieron en julio por segundo mes consecutivo desde que se instaló la reapertura gradual de actividades, pero ya a una velocidad menor que en junio, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El consumo de familias y hogares en México aumentó 5.2 por ciento en julio, respecto del mes inmediato anterior, mientras la inversión fija bruta lo hizo 4.4 por ciento. Tras colapsar entre abril y mayo, en junio estos indicadores crecieron 5.6 y 20.1 por ciento, respectivamente.
Para analistas financieros, se espera que en los próximos meses estos indicadores se recuperen –sobre todo en el consumo–, pero la velocidad a la que lo hagan dependerá de que cedan los contagios de Covid-19 y a que se compense la destrucción de empleos que acarreó el confinamiento en los inicios de la pandemia.
Retroceso a tasa anual
A tasa anual, Inegi reportó que la inversión fija bruta llegó a 18 meses seguidos en contracción durante el pasado julio, cuando cayó 21.2 por ciento respecto del periodo comparable de 2019; mientras el consumo se redujo 15.3 por ciento.
Citibanamex informó que incluso respecto de febrero, antes de la pandemia en México, el consumo de julio fue 14.3 por ciento menor y la inversión decreció 17.9 por ciento.
Sumado a esto, entre enero y julio de 2020 el consumo privado disminuyó 12.1 por ciento anual en cifras desestacionalizadas –la menor tasa desde que hay registro– y la inversión lo hizo 21.7 por ciento, la más baja desde 1995, también en el marco de una crisis, evidenció el área de análisis del banco.
La inversión acumula un revés de 15 años. Entre sus componentes, la construcción decreció en julio 23.7 por ciento anual y la adquisición de material y equipo mermó 17.6 por ciento.
En la comparación mensual, Inegi exhibió que en julio la inversión fija bruta creció 4.4 por ciento; aumentó 11.1 por ciento la compra de maquinaria y equipo y en la construcción creció 1.1 por ciento.
En el consumo de los hogares, los datos de julio evidencian un retroceso comparable con junio de 2013. A tasa anual se redujo las adquisición de insumos importados que cedieron 22.7 por ciento y los nacionales lo hicieron en 14.3 por ciento. Este indicador aumentó 5.2 por ciento en julio y por componentes la compra de insumos de origen nacional creció 5.4 por ciento, respecto del mes inmediato anterior y la de bienes importados lo hizo en 6.4 por ciento. Todo en cifras desestacionalizadas, detalló el organismo.
Iván Huerta, de Ve por Más, expuso en un reporte a inversionistas que el control adecuado de la pandemia impactaría positivamente al consumo. No obstante también está como principal riesgo que se acelere la propagación del virus y se recrudezcan las medidas sanitarias
, amplió.