Ciudad de México. La Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR) llegó a su 31 aniversario, su origen se remonta a 1930, cuando se creó la Confederación Nacional de Transportes de la República Mexicana que agrupó a los distintos modos de transporte mexicano: ferroviario, marítimo, carretero y aéreo; en 1937 el organismo se transformó y surgió la Cámara Nacional de Transportes y Comunicaciones (CNTC).
Por su parte, Enrique González Muñoz, presidente nacional de CANACAR, expresó que este 31 aniversario es momento para resaltar que la institución siempre ha estado en los grandes cambios de país, asumiendo cada vez más ese papel como sector transversal para todas las cadenas productivas del país. “Es importante decir que la situación que estamos viviendo, hoy como desde hace 31 años seremos también el órgano y el sector permita recobrar el rumbo del país”.
“Seguiremos siendo el órgano serio e interlocutor, siempre dando las soluciones antes que quejas en beneficio de nuestra nación”, destacó González Muñoz.
El 18 de julio de 1989 un comité integrado por Francisco José Dávila Rodríguez, Bernardo Lijtszain Bimstein, Miguel Quintanilla Rebollar y Héctor Larios Santillán, solicitó a la entonces Secretaría de Comercio y Fomento Industrial (SECOFI) del Gobierno Federal, la autorización para constituir la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga.
Tras cumplir con el procedimiento y los requisitos de la Ley de las Cámaras de Comercio y de las de Industria de 26 de agosto de 1941, la SECOFI autorizó la constitución de CANACAR por resolución del 25 de septiembre de 1989. Cuatro días después, la autorización y los primeros estatutos de la Cámara, aprobados por la dependencia, fueron publicados en el Diario Oficial de la Federación.
El proceso de desregulación y liberación de las actividades económicas a principios de la década de los noventa hizo necesario que el sector contara con una organización que la condujera por este camino conocido como la “mayoría de edad” en el cual, se le retiró toda la política paternalista que muchos años tuvo para empezar a caminar por su propios medios y fuerzas. CANACAR ha sido fundamental en ese proceso
La firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte hizo que el autotransporte de carga jugará un papel determinante para aprovechar esas oportunidades y que nuestro país se convirtiera en una nación emergente, atractiva a las inversiones. Esa bonanza de una nueva era obligó también a que el sector recorriera el camino de la competitividad y evolución orgánica por los últimos 31 años.
Actualmente y de acuerdo con José Refugio Muñoz López, vicepresidente ejecutivo de CANACAR, los 9 meses de crisis de salud y económica que han transcurrido en este 2020 “han puesto a prueba no solamente a cada mexicano y a cada una de las empresas, sino también a las propias organizaciones empresariales que han tenido que asumir con más vigor el rol que les corresponde jugar, y CANACAR ha sabido responder a esa expectativa, ya que se ha puesto al frente de situaciones adversas y ha tomado acciones que benefician no solo a los transportistas de carga, sino al país”.
Muñoz López asegura que México y el mundo entero están entrando a la cuarta revolución industrial y el autotransporte de carga nacional está entrando a su segunda gran transformación.
“La primera ocurrió hace 31 años cuando nació CANACAR como producto de la desregulación. Hoy, estamos enfrentando el gran reto de adecuar nuestro sector a un nuevo y desafiante escenario de transformación comercial, industrial y tecnológica, y CANACAR está llamada, de nueva cuenta, a ser ese órgano que dirija este proceso”, apunta.
“Quienes no nos adoptemos y aprovechemos ese legado que nos está dando esta cuarta revolución industrial, y la segunda transformación del autotransporte, estaremos condenados a perecer. Es una exigencia para todos, incluyendo al gobierno con sus instituciones y procesos, a través del uso de nuevas tecnologías. La realidad es que no tenemos mucho tiempo para adecuarnos y salir fortalecidos”, añadió.
En 31 años la cámara ha sido conducida por Francisco José Dávila Rodríguez (1989-1994); Bernardo Lijtszain Bimstein (1994-1999); Miguel Quintanilla Rebollar (1999-2001); Manuel Gómez García (2001-2003); León A. Flores González (2003-2005); Tirso Martínez Angheben (2005-2008); Jorge Cárdenas Romo (2008-2009); Juan Carlos Muñoz Márquez (2009-2012); Roberto Díaz Ruíz (2012-2015) y Rogelio Montemayor Morineau (2015-2018); siempre hemos mantenido la misma visión: promover las buenas prácticas del sector, el desarrollo y la profesionalización del autotransporte de carga.